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Úrculo descalifica a Poyatos como candidato a fiscal jefe de la Audiencia Nacional

El fiscal general del Estado, Juan Cesáreo Ortiz úrculo, descalificó ayer en la práctica a Luis Manuel Poyatos como fiscal jefe de la Audiencia Nacional al asegurar que se está "replanteando" su candidatura tras la aparición de "nuevos datos sobre su persona" que o conocía. Úrculo, que parece confiar en que sea el propio Poyatos quien renuncie, fue vapuleado por toda la oposición, al comparecer ante la comisión de Justicia del Congreso, por la situación en que ha dejado la fiscalía de la audiencia trás la destitución de José Aranda. Y admitió su error al divulgar en una nota de prensa el envío a la Fiscalía Anticorrupción de actuaciones contra directivos de Ferrer Europa y Antena 3 antes de haberse iniciado diligencias judiciales.

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Fuentes de la Fiscalía del Estado daban ayer por seguro que, en los próximos días, Poyatos retirará su candidatura a fiscal jefe de la Audiencia Nacional, después de haberse conocido su condición de Gran Canciller de la Orden Hospitalaria y Militar de San Juan de Jerusalén, organización vinculada a la extrema derecha. El fiscal dio a entender que desconocía ese dato. No hizo mención alguna de la trayectoria de Poyatos en el Tribunal de Orden Público durante el franquismo ni de que convalidase con su firma la libertad del mafioso italiano Antonio Bardellino.Úrculo alabó "la responsabilidad" que, a su juicio, está demostrando Poyatos por "querer contribuir a la normalización de la fiscalía de la Audiencia Nacional", y también por `replantearse la cuestión a la vista de las circunstancias". Paralelamente, fuentes fiscales aseguraban que, si Poyatos no renuncia a su propia candidatura, será Úrculo quien retire la propuesta de presentarle como candidato.

Durante su comparecencia ante la comisión de Justicia, Ortiz Úrculo recibió un aluvión de críticas tras explicar los motivos por los que envió la Inspección

la Audiencia Nacional, destituyó a su fiscal jefe, José Aranda, y expedientó a cuatro fiscales.. El fiscal trató de justificar la destitución de Aranda por el "nerviosismo" de éste y la "crisis de autoridad" en la Audiencia Nacional con fiscales que mantenían enfrentamientos por escrito con su jefe. Entre afirmaciones de la "calidad humana y profesional de Aranda" -"un gran fiscal que ha ejercido con gran dignidad", dijo-, justificó su remoción en siete causas, desde la ambigüedad" en la orden dada a Pedro Rubira para que pidiese la libertad del general Rodríguez Galindo, hasta que "el archivo de las carpetillas en la Fiscalía no era bien llevado".

El fiscal general insistió en cuatro ocasiones en que la destitución se hizo "con todas las garantías" para el destituido, y opinó que el cambio de Aranda "había estado bien" porque, tras el mismo, había disminuido la tensión en la Fiscalía.

El portavoz del PSOE, Juan Alberto Belloch, criticó que Ortiz úrculo, en vez de resolver el Conflicto en la Fiscalía de la Audiencia, hubiese salido "en auxilio de una de las partes, poniéndose del lado de los amotinados". "Después de tirar por la borda al capitán, aún dice que se han quedado tranquilos los amotinados", agregó con sarcasmo.

Belloch aseguró que la destitución de Aranda no había sido "ni proporcional, ni justa", después de que éste llevase 39 años en la carrera fiscal, sin haber tenido ningún problema en ningún sitio y Úrculo le hubiese puesto "a los pies de los caballos", mientras que, ahora, el propio Úrculo "ni siquiera es capaz de cubrir la vacante" causada por su actuación.

El portavoz socialista recordó que fue Aranda quien impidió la prescripción del caso GAL y que los problemas con éste empezaron, no como consecuencia de los GAL, sino desde que Aranda "se atrevió" a querellarse contra Mario Conde. "Al día siguiente, comenzaron los amotinados a hacer su trabajo", añadió, y "nunca hasta ahora se ha resuelto una crisis con tanta crispación, desobediencia y espectáculo público". Sobre la "candidatura tan popular" del fiscal Poyatos, Belloch ironizó que ésta al menos le había permitido "escuchar a la ministra de Justicia, que está especializada en defender a personas como Estevill, López Amor o Poyatos".Celo selectivo

Belloch acusó al fiscal del Estado de tener un "celo notable, pero selectivo, con indicios racionales de parcialidad" y de "utilizar la institución para atacar a empresas privadas que han cometido el crimen de tener una política informativa distinta de la que trata de imponer un poderoso sindicato". Tras señalar que "es difícil que el Gobierno actúe con el sectarismo con que actúa usted", Belloch aseguró que no, iba a pedir la dimisión de Úrculo, pero le advirtió que ha perdido la confianza de su grupo.

Los portavoces de IU, PNV y EA también criticaron diversos aspectos relacionados con la inspección y la forma en que úrculo ha llevado la crisis de la Audiencia. Pablo Castellano, de IU, la criticó por "parcial, sesgada" y dirigida a determinados fiscales que actúan en sumarios que tienen "nombres y apellidos". Ortiz Úrculo replicó que sólo uno de los cuatro expedientados lleva sumarios relacionados con los GAL.

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