Mayor dice que no perderá cinco minutos con los diputados que verán a Txikierdi

El ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, ha confirmado veladamente su negativa a recibir a los diputados vascos que se entrevistarán con el dirigente etarra Juan Lorenzo Lasa Mitxelena, Txikierdi, "No estoy dispuesto", dijo, "a perder cinco minutos en hacer seguimientos propagandísticos, tácticos o estratégicos que no comparto". La diputada de IU Rosa Aguilar considera que el ministro "está obligado" a recibir a cualquier delegación de cualquier Parlamento autónomo y a la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara vasca.

El ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, afirmó en Pamplona que la decisión de la Comisión de Derechos Humanos del Parlamento Vasco de entrevistarse con Txikierdi "nace viciada porque se produce desde la confrontación". Mayor, en una cena-coloquio que siguió el pasado lunes a su intervención en Navarra Foro XXI, agregó: "A mí nadie me ha pedido ninguna entre vista de la comisión de Derechos Humanos todavía" y precisó que esta comisión, "se dirigirá a la instancia que considere oportuna y tendrá la respuesta". Sin embargo, el titular de Interior, quien afirmó tener únicamente constancia de una petición remitida al director de la cárcel de Alcalá-Meco (Madrid), aseguró de todas formas que no está "dispuesto a perder cinco minutos en hacer seguimientos propagandísticos, tácticos o estratégicos" que no comparte. "Yo estoy dispuesto a trabajar y evaluar todo lo que se haga alrededor de la Mesa de Ajuria Enea, de Pamplona o de Madrid-Porque yo creo en eso", agregó.

Mayor se mostró contrario a iniciativas "de carácter unilateral" como la adoptada por la comisión de Derechos Humanos. A su juicio, el procedimiento acordado "no va a dar nada de sí, y únicamente va a seguir provocando un debate que no lleva a ningún lado, porque nace viciado, porque no se produce desde el acuerdo sustancial en el seno de una institución como el Parlamento Vasco". El ministro se mostró dispuesto "a rectificar y decir que ha sido una buena iniciativa" si dentro, de dos meses así se demuestra.

Por contra, la portavoz de lU en el Congreso, Rosa Aguilar, proclamó en Los desayunos de Radio Nacional: "El ministro del Interior no puede ser el ministro del Partido Popular, tiene que ser el ministro de todos y está obligado á recibir a cualquier delegación de cualquier Parlamento que solicite verse con él. No puede no recibir a los representantes del Parlamento vasco".

En relación con la entrevista con Txikierdi solicitada por José Antonio Rubalcaba, del PNV Javier Madrazo, de Izquierda Unida, Jone Goirizelaia, de Herri Batasuna, y Jasone Irarragorri, de Eusko Alkartasuna, Rosa Aguilar considera que estos parlamentarios "están obligados" a acudir a la llamada del dirigente etarra. "Sobre todo en unos momentos en los que, si se puede dar algún paso para conseguir la liberación de Ortega Lara y de Cosme Delclaux, bien venido sea", agregó Aguilar.

El presidente de Eusko Alkartasuna, Carlos Garaikoetxea, opina que "se ha desmesurado el carácter excepcional de la visita a Txikierdi, cuando se inscribe en un programa que suele ser muy normal". Según Garaikoetxea, los parlamentarios "tienen la suficiente sagacidad" para observar si en ese contacto existe una actitud positiva por parte de ETA o si ésta quiere hacer "una utilización bastarda" de esa entrevista.

Por contra, el diputado socialista Joaquín Almunia, califica de "muy mala decisión" que una delegación parlamentaria vaya a entrevistarse con el dirigente Lasa Mitxelena. "Creo sinceramente que la prioridad en la defensa de los derechos humanos", argumentó, "está más bien en tratar de poder hablar con quienes no pueden hacerlo por estar secuestrados por ETA".

Interior aún no había respondido ayer a la petición de Rubalcaba, Madrazo, Goirizelaia e Irarragorri al director de Alcalá-Meco, Jesús Calvo, para reunirse con Txikierdi en esta cárcel. No obstante, fuentes penitenciarias dan por seguro que Interior autorizará esta entrevista.

Paulino Baena, portavoz de la Asociación Víctimas del Terrorismo, cree que "es una vergüenza que representantes políticos de partidos democráticos acuerden ir a postrarse ante un dirigente de ETA preso para presentarle un plan de acercamiento de presos vascos" a Euskadi.