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LA LUCHA CONTRA ETA

Golpe a la dirección de ETA con la detención de Urrusolo

Interior lo considera uno de los pistoleros más sanguinarios de la banda

"Han dado ustedes un bonito golpe. Soy un importante dirigente de ETA". José Luis Urrusolo Sistiaga, de 39 años, se identificó así ante los agentes franceses que le interceptaron en las proximidades de Burdeos. El jefe del aparato de cursillos de adiestramiento y previsible número tres de ETA, al que Interior relaciona con 16 asesinatos y dos secuestros, cayó sobre las nueve de la noche del pasado jueves. Y confesó inmediatamente, dando una vez más muestras de su frialdad. Según la versión oficial, los gendarmes buscaban terroristas islámicos y se toparon con Urrusolo cuando éste intentó saltarse un control de carreteras. Según otras fuentes españolas, la captura del etarra no fue tan casual, ya que la Guardia Civil le seguía los pasos. Ayer tarde fueron detenidos su esposa, Gemma Pérez de Berrueta; su hijo Iker; sus hermanos Sabino, Juan Lorenzo y Alejandro Urrusolo, así como su cuñada Milagros Pérez de Berrueta.

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La captura de Urrusolo supone uno de los golpes más fuertes contra la dirección etarra desde la detención de la dirección de la banda en 1992 en Bidart. La caída del terrorista se suma a otras detenciones importantes efectuadas por la policía francesa durante los últimos meses.José Luis Urrusolo, que conducía un Fiat Tipo con matrícula falsa M-7531-ST, fue capturado tras 10 minutos de persecución, cuando se salió de la calzada. El primer ministro francés, Alain Juppé, se felicitó por la. captura de Urrusolo, que será juzgado y probablemente cumplirá una condena en Francia por tenencia ilícita de armas antes de ser extraditado a España.

La gendarmería había establecido un control en la pequeña carretera departamental 708, entre los pueblecitos vinícolas de Sainte Foy la Grande (Gironda) y Miramont de Guyenne (Lot-et-Garonne). Según fuentes oficiales, se trataba de una operación rutinaria dentro del plan Vigipirate, un dispositivo contra el terrorismo islámico intensificado durante los últimos días porque los servicios de información sospechaban que las redes integristas preparaban nuevos atentados.

Dos centenares de vehículos habían sido ya controlados cuando le tocó el turno a un Fiat Tipo, de color gris, que inicialmente redujo la marcha pero luego aceleró y escapó de los gendarmes.

Varios coches policiales se lanzaron inmediatamente tras el fugitivo. La persecución se prolongó durante cuatro kilómetros, hasta que Urrusolo perdió el control de su automóvil y cayó a una cuneta en las cercanías de Marqueron. El etarra quedó conmocionado durante unos instantes, lo que dio a los gendarmes el tiempo necesario para reducirle sin necesidad de utilizar sus armas. "Le inmovilizamos cuando intentaba sacar una pistola de una bolsa de viaje", declaró el coronel Christian Brachet, jefe de la Gendarmería de Gironda. Era una pistola de perdigones, manipulada para disparar munición del calibre 22 largo.

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Habló en francés

Atrapado, Urrusolo confesó su identidad: "Han hecho ustedes una bonita captura; soy un importante dirigente de ETA", dijo a los policías. Según el coronel Brachet, Urrusolo habló siempre en francés y se negó expresamente a hacerlo en español, pese a que alguno de los agentes era hispanohablante.El jefe etarra transportaba en su bolsa abundantes documentos falsos: pasaportes, permisos de conducir, carnés de prensa e incluso identificaciones policiales. Lo que no llevaba Urrusolo era la documentación del Fiat Tipo, sustraído 24 horas antes, al que le había acoplado una falsa matrícula de Madrid. "Probablemente fue la carencia de los papeles del coche lo que le empujó a huir, y probablemente por eso se produjo la detención", añadió Brachet.

José Luis Urrusolo Sistiaga fue trasladado a Burdeos, donde permanecía anoche. La juez antiterrorista parisina Laurence Le Vert se hizo cargo del caso y dirigió los interrogatorios, encaminados a tirar del hilo y desbaratar toda la infraestructura dependiente de Urrusolo, cuya función en Francia era actualmente la de jefe del aparato de cursillos de adiestramiento en armas y explosivos.

Fuentes policiales de París indicaron ayer que Urrusolo, como casi todos los etarras detenidos en Francia, sería acusado de tenencia ilícita de armas y de uso de documentos falsos, por lo que, de ser considerado culpable de esos delitos, debería cumplir condena en una cárcel francesa antes de ser extraditado a España.

El primer ministro francés, Alain Juppé, se encontraba ayer en Burdeos, ciudad de la que es alcalde. Juppé expresó su satisfacción por el éxito policial: "Me alegro de que podamos marcar puntos contra el terrorismo", dijo. "La colaboración con las autoridades españolas en materia de lucha contra el terrorismo y la violencia es muy estrecha", añadió.

Los gendarmes habían montado un control calificado por los vecinos de la zona como "espectacular" e inhabitual. Después de arrestar a Urrusolo, los agentes descubrieron en su poder una pistola adaptada para disparar munición del calibre 22, un permiso de conducir falso y varios pasaportes, uno de ellos en blanco, según fuentes policiales españolas. Este hecho y la circunstancia de que viajara en un coche con matrícula falsa de Madrid ha disparado las hipótesis.

Expertos antiterroristas reconocieron anoche que no podían precisar si Urrusolo pretendía, trasladarse en breve a Madrid o bien si iba a entregar el vehículo para que posteriormente fuese puesto a disposición del comando que actualmente opera en la capital de España. Este grupo asesinó la semana pasada al teniente coronel Jesús Agustín Cuesta en el barrio de La Estrella.

Fuentes policiales dan por seguro que Urrusulo era actualmente el responsable del aparato de cursillos de adiestramiento en armas, explosivos y manejo de coches bomba teledirigidos (kamikazes). Aunque los expertos le suponen integrado en el aparato de logística, consideran que hasta el momento no había pasado a ocupar la jefatura de este departamento, que quedó vacante el pasado verano a causa de la detención en Francia de Julián Atxurra Egurola.

"Lógicamente, mi mayor interés es saber si Urrusulo puede facilitar alguna pista sobre los secuestrados Cosme Delclaux y José Antonio Ortega Lara. Yo he pedido a la policía que de prioridad a este asunto", declaró ayer el ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja. Sin embargo, los expertos antiterroristas dudan de que la captura de este destacado activista sirva para hallar algún hilo.

Una noche larga

"Ha sido una noche larga en la que los responsables de Interior hemos dormido poco, aunque la verdad es que merece la pena pasar, noches en blanco por esta causa", relató el viceministro de Seguridad, Ricardo Martí Fluxà, quien dijo que conoció la noticia a través de una llamada de la Guardia Civil a las 12 de la noche del jueves.La operación continuó con la detención de la esposa de Urrusolo, Gemma Pérez de Berrueta y de su hijo lker, en la vivienda que ocupaban junto con una hija de siete años, en Roumagne, a unos 100 kilómetros de Burdeos. En las proximidades se localizó una caravana con matrícula de Madrid.

Gemma Pérez de Berrueta fue interceptada con una maleta en la que llevaba dos metralletas Uzi y un fusil de asalto G-3. En la casa se hallaron también dos ordenadores, un fax, documentación y ropa de Juan María Insausti Múgica, Karpov, y su compañera María Nieves Sánchez del Arco, ambos detenidos en noviembre, que hasta su expulsión de ETA compartían tareas con Urrusolo.

Un juez de la Audiencia Nacional se trasladará los próximos días a París para estudiarla documentación incautada al etarra, cuya extradición será solicitada por el asesinato de dos policías en Barcelona en 1991.

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