Mastroianni
El actor italiano Marcello Mastroianni destacaba por interpretar sus papeles partiendo de su base interior. No le hacían falta máscaras, engordes desmesurados ni finuras invisibles. Sin alteraciones de algún tipo, sólo las propias de la edad, creó en Ojos negros al personaje más vivamente libre que ha visto el cine, y elevó a categoría musical el hecho de acudir a una fiesta.Además, Mastroianni representa en mi mundo particular la imagen del hombre libre. En mi época de militar ridículo, mientras hacía guardias en un edificio, vestido de azul y empuñando una pistola que no sabía manejar, me salvó de algunas depresiones. El recuerdo de las imágenes de Ojos negros, sobre todo el final, cuando recorre la estepa rusa al amanecer subido en una vieja carreta de caballos, me sirvieron de auténtico bálsamo.
Él dijo que había que vivir por encima de todo: en silla de ruedas, inmovilizado en cama... Sea como fuere, en sus últimos días aún tuvo el coraje para describir cómo le iba destruyendo el cáncer por dentro. A pesar de ello, demostraba las mismas ganas de vivir que el joven periodista que interpretó en La dolce vita. Esto lo dice todo.-
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