España es un arroz

Lo apalabró para la leyenda el señalado poeta valenciano Teodoro Llorente: "Si fueras rey de España, ¿qué comerías tú hoy ... ?'/. '¡Qué pregunta más tonta! / Arroz en fesols i naps", o lo que se le asemejaría: arroz con alubias y nabos. Y viene a cuento el rey y el arroz porque ¿cómo sería alguien de mucha grandeza un rey de España que no comiere arroz en estos días que median entre el último día del año viejo y el día de Reyes, que es como la puerta de salida hacia la aventura de los 360 días restantes de 1997... que ¿qué harán de nuestras vidas?No hay más que decir para reposar. España no es un arroz, pero podía serlo. ¡Qué raro es dar con un arroz de aplauso, pero qué rarísimo es el español que mire malamente el arroz nacional: el arroz en paella, el arroz en caldero (caldoso y meloso: con puerros y almejas), el arroz en cazuela (con los ingredientes del cocido del día anterior)!

¿Y dónde vivir la esperanza de una paella valenciana con el arroz, el pollo, la verdura y el garrafó (judión grande valenciano) que le da carácter?: en Madrid casi no hay duda. L'Albuféra (teléfono 579 63 74) tiene un local ajardinado, otro que no lo es, otro más a un nivel diferente. Es un teatro donde el marisco y el arroz ejercen de protagonistas; y un servicio correcto, y unos precios (2.000-3.500 pesetas) que se olvidan con su tipo de arroz, bogavante y sepia incluidos; su arroz negro con chipirones, y con música idéntica, 14 especialidades para fiesta y rito.

Y que digan lo contrario los rutinarios, pero la madrileña Barraca (teléfono 532 71 54) ha vivido toda una vida inventando arroces, y se nota y se saborean. Hablar del restaurante Siete Puertas de Barcelona, para las gentes apinceladas, será inoportuno. Pero quien pase por la vida sin oler, ver, degustar, los arroces melosos de este santuario de la leyenda de la gastronomía barcelonesa, léase catalana..., ese ser no habrá sido todo lo que pudo ser.

Y en Alcudia (Valencia), cuando se han recorrido 30 kilómetros más allá de la patria de los arroces (¿no es el mundo la capital del arroz?), un restaurante que se nombra Galbis (teléfono 254 10 93) exige parada y ofrece mesa distinguida para que la paella huertana o la valenciana... recuerden en silencio que cuando ya se ha comido todo, como ocurre en navidades, el arroz es la gran novedad hispánica para propios y extraños.

Y que nadie imagine problemas para beber con un arroz: el vino grande o menos enorme se conforma con sus gustos; el vino blanco seco no pide más que un arroz para realizarse. Y el cava es lo propio.