Una asociación de minusválidos pide ayuda al Defensor del Pueblo

Los lesionados medulares temen por la estabilidad del centro que les presta rehabilitación poshospitalaria, el regentado por la Asociación de Parapléjicos y Grandes Minusválidos Físicos de Madrid (Aspaym) en Puente de Vallecas. Este funciona desde 1994 mediante conciertos anuales con el Inserso. Pero el Gobierno regional, a quien ha sido transferido el Inserso, alega que la Ley de Contratos de las Administraciones Públicas de mayo de 1995 exige que este servicio, sin cláusula de prórroga, se saque a concurso. Aspaym niega que exista esa cortapisa legal y ha recurrido al Defensor del Pueblo para mantener el centro abierto. Creen que una atención que no presta ningún centro oficial no puede depender de algo tan voluble como las subvenciones.La directora general de Servicios Sociales, Concepción Lostau, afirma que, según la ley, el concierto no se puede renovar. "Se podría si contase con una cláusula de prórroga, yo creo que el Inserso no la incluyó en 1996 porque sabía que lo firmaba por los pelos, ya que entonces estaba en vigor la ley que obliga a sacar estos servicios a concurso público", afirma. "A nosotros nos gustaría pode renovar el concierto. Para 1997 les mantendremos por subvención lo que recibían (32,5 millones), y luego veremos", concluye.