La 'lista de Lissner'

Stéphane Lissner tiene claro que no va a contratar a la orquesta en bloque porque ello frustraría su intento de crear un grupo de nivel europeo que atraiga a grandes directores al foso del Real. "Yo no voy a hacer un contrato con todos", explicó tras desencadenarse la polémica. "Quiero empezar con una orquesta de 79 músicos. Creo que el hecho de que sean más ha creado una situación de guerra interna dentro de la orquesta. Cuento con el acuerdo de la Comisión Ejecutiva del teatro para el proyecto, y mi proposición de seleccionar 62 músicos del centenar que forman la OSM es muy razonable". "Yo no he mentido ni estoy loco", afirma Lissner. "Se trata de una cuestión interna de la orquesta: unos están de acuerdo y otros no. Diversos directores que conocen bien ese conjunto, como Ros Marbá, se muestran partidarios dé que se produzca una firme renovación". Aquí han participado en las audiciones los mejores cantantes españoles".

Tras estallar la polémica, Stéphane Lissner explicó que él y Adolfo Garcés, portavoz de la OSM que se encontraba la pasada semana cumpliendo compromisos de conciertos en América, llegaron a un preacuerdo en su despacho del Real días antes, en presencia de Mercedes Guillamón. Según Lissner, allí se sentaron las siguientes bases: "el nombre del grupo, 'Orquesta del Teatro Real', con la posibilidad de añadir Orquesta Sinfónica de Madrid; el número de miembros de la futura agrupación, un total de 79, y el acuerdo sobre la lista, aunque con el compromiso de hablar detenidamente para la posibilidad de ampliar los 62 músicos incluidos en ella". También se discutió, según Lissner, si el contrato se firmaría por dos años o por tres.

Turina expresa que "en la orquesta no hay disensión alguna. Hemos escrito un documento firmado por casi la totalidad de los músicos rechazando los planteamientos de Lissner. Las pocas firmas ausentes son las de quienes están de baja médica y hemos tenido adhesiones telefónicas". El escrito llegó por fax al despacho de Lissner el pasado jueves, y en él se adjunta una nota personal de Garcés desmintiendo las divisiones internas y recalcando su solidaridad con el núcleo orquestal del que es representante en estas negociaciones.