Iberia pide a sus socios en Viasa que inviertan dinero para evitar la quiebra

Iberia quiere poner orden en sus filiales. El presidente del grupo, Xabier de Irala, viajó ayer a Venezuela donde planteará a las autoridades la necesidad de acometer un

duro plan de ajuste en la compañía aérea Viasa, en la que el grupo español tiene una participación del 45% que le convierte en el mayor accionista. De Irala solicitará a los accionistas venezolanos que aporten capital y sí no aceptan, Iberia no descarta que Víasa vaya a la quiebra. La compañía española ha invertido en la venezolana unos 30.000 millones de pesetas y no está dispuesta a aportar mucho más después de no haber visto ni una peseta de beneficio.

La aventura americana que Iberia acometiera a comienzos de los noventa se va decantando por diversos caminos tras una marcha que se puede calificar de desastrosa. Una vez realizada la desinversión en Aerolíneas Argentinas -donde Iberia conserva ahora la gestión y un 10 %, de capital- y mientras en Chile siguen los líos jurídicos entre los diferentes accionistas de Ladeco, Iberia ha decidido coger el toro por los cuernos en Venezuela. De Irala tiene previsto entrevistarse hoy, martes con los responsables del Fondo de Inversiones de Venezuela (FIV), un holdíng público venezolano que posee el 40% del capital de Viasa, mientras el Banco Provincial de Venezuela es el propietario del otro

19 %. De Irala se eritrevistará con algún miembro del gobierno.

El objetivo del viaje es plantear al FIV la necesidad de acometer un duro plan de ajuste que suponga el adelgazamiento de Víasa en todos sus parámetros. Ello implicara la reducción de costes de personal y llevará probablemente aparejada una reducción de la plantilla. Pero, además, expondrá la urgencia de que la FIV inyecte capital en la compañía sí no se quiere terminar en la quiebra. La empresa española estaría dispuesta a aportar algo, pero en cualquier caso en cantidades menores dado el esfuerzo inversor que Iberia ha realizado en Viasa durante los últimos años.

Los resultados

Iberia entró en Viasa en 1991 y pagó por su participación 80 millones de dólares. Dos años después, Iberia. y el FIV acudieron a una reposición de pérdidas que supuso un desembolso para la compañía española de 60 millones de dólares más. Desde entonces, Iberia ha inyectado en solitario capital en Viasa por valor de 140 millones de dólares sin que la compañía consiguiera beneficios ni un sólo año, aunque sí mejorar los resultados, A 31 de diciembre de 1995 sus fondos propios eran de tres millones de dólares.Por lo que respecta a la plantilla, también se ha ido reduciendo. Para una flota de 12 aviones, Viasa tiene ahora 2.244 empleados, frente a 3.500 en 1991. Entonces, por poner un ejemplo de la situación, por cada avión Viasa tenía 37 pilotos cuando la media mundial era de 15, y la proporción apenas ha variado puesto que la reducción de empleo ha afectado casi en su totalidad a los trabajadores de tierra.

Iberia fue la única que pujó en firme por Viasa, la primera compañía pública venezolana que se privatizó. Y entró en ella, según han repetido los entonces responsables de la decisión, por considerarlo estratégicamente conveniente. Sin embargó, la realidad ha dado la vuelta a las mejores intenciones. El caso más claro, por ser también el más importante, ha sido el de Aerolíneas Argentinas. Ella sola se comió la casi totalidad de la ampliación de capital de 120.000 millones de pesetas que Iberia realizó en 1992.

Iberia acomete el saneamiento de las inversiones en Latinoamérica una vez que está en marcha el plan de viabilidad y que los resultados económicos van mejor de lo esperado. Frente al compromiso de tener beneficios netos de 1.500 millones de pesetas que Iberia presentó a la Comisión Europea, este año la compañía presentará ganancias de 3.000 millones.