El PP gallego critica el transfuguismo tras pactar con un disidente del PSOE
El transfuguismo político es una "lacra", una "perversión" y un "factor de impureza democrática". Tales calificativos no llamarían mucho la atención si no fuese porque los pronunció ayer el portavoz del PP en el Parlamento gallego, Víctor Vázquez Portomeñe, menos de 24 horas después de que su partido arrebatase al PSOE la alcaldía de Castro Caldelas (2.000 habitantes, provincia de Orense) mediante un pacto con un disidente socialista.El vicesecretario regional del PSOE, Miguel Cortizo, comparó lo ocurrido en Castro Caldelas con el intento de asalto al despacho del alcalde de Hernani (Guipúzcoa). "Allí hubo violencia fisica, aquí violencia política", dijo.
Ahora, el Partido Popular vuelve a hacer propósito de enmienda. Ya ocurrió en septiembre, a causa de la borrasca desatada por la alianza entre los populares y otro disidente socialista en Redondela (Pontevedra).
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