Los funcionarios convocan una cadena de paros en noviembre contra la congelación salarial

Los sindicatos de la función pública anunciaron ayer una cadena de paros parciales contra la congelación salarial que empezará el 15 de noviembre y culminará con una marcha sobre Madrid el 23 de ese mes. Tres días después, el 26, los sindicatos se reunirán y si el Gobierno para entonces no ha modificado su decisión, convocarán huelga general en el sector. Así pues, la tramitación parlamentaria de los Presupuestos irá acompañada de las protestas de los funcionarios. El secretario de Estado de la Función Pública, Francisco Villar, asegura que la decisión del Ejecutivo "no tiene vuelta atrás".

Diez sindicatos de la función pública -UGT, CC OO, USO, ELA, CIG, CSI-CSIF, ANPE y STE'S (enseñanza), y SUP y UFP (policía)- decidieron ayer en una reunión conjunta dar un periodo de gracia al Gobierno durante este mes de octubre para reanudar la negociación y convocar, si no se modifica la congelación salarial en el sector prevista en la Ley de Presupuestos, una cadena de protestas a partir de noviembre. La CGT, que también participó ayer en la reunión de los sindicatos, indicó en conferencia de prensa que había presentado a la cumbre sindical una propuesta alternativa y que dará su respuesta al acuerdo de ayer en unos días.Las movilizaciones se dividen en dos tandas. Del 5 al 7 de noviembre habrá paros de entre una y dos horas como media en toda España, por sectores. Del 12 al 21 de noviembre pararán, por comunidades autónomas, todos los sectores también como mínimo una hora. El día 23 se convoca una marcha sobre Madrid y el 26 una nueva cumbre sindical decidirá, si no ha habido cambios en la tramitación parlamentaria de los Presupuestos, convocar huelga general en todo el sector. Según manifestó Carlos Sánchez, si para entonces no ha cambiado nada, "más que un anuncio, la huelga general es una realidad cantada".

De este modo, las centrales sindicales inician un periodo de movilizaciones parciales, pero continuas, y guardan el cartucho más fuerte para el final.

Al tiempo, según manifestaron ayer en conferencia de prensa, lanzan un llamamiento al Gobierno para negociar. Sin embargo, la tensión en el sector se ha acrecentado tras las masivas manifestaciones llevadas a cabo el pasado día 15 en toda España y sobre las que los sindicatos dijeron ayer sentirse muy satisfechos.

La convocatoria de movilizaciones no hará cambiar los planes del Ejecutivo. El secretario de Estado de la Función Pública, Francisco Villar, declaró ayer a EL PAÍS que "la congelación salarial no es una medida agradable, pero se ha tomado de manera seria y responsable". Asimismo aseguró tajantemente que "no tiene vuelta atrás". El Gobierno central tiene también la firme decisión de que todas las comunidades autónomas y ayuntamientos apliquen lo que es "una norma básica de obligado cumplimiento". y presentarán en los tribunales todos los recursos que sean necesarios. Villar precisó: "Nuestra obligación es hacer cumplir la ley y espero, que ningún ayuntamiento ni ninguna comunidad incumpla lo que es una norma básica".