_
_
_
_

ERC cree que el grupo de escindidos con Colom acabará en brazos de la derecha

Enric Company

La dirección de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) redobló ayer las: acusaciones de transfuguismo y las exigencias de que los escindidos Ángel Colom, Pilar Rahola y los cuatro diputados que les han seguido devuelvan los escaños que ocupan. Josep Lluís Carod, que será con toda probabilidad el nuevo secretario general, acusó a Colom de haber pretendido que ERC se convirtiera en un club de fans" y de protagonizar "una aventura personal" que acabará echándole en brazos de otro partido, que será de derechas.

Esquerra Republicana se reponía ayer a duras penas del mazazo que ha supuesto la escisión de quienes hasta el martes eran. su secretario general y su figura pública más conocida. Los dirigentes de ERC tienen, sin embargo, auténticas dificultades para dotar de contenido político la batalla verbal con los escindidos. Están absolutamente convencidos de que la escisión responde sólo a la necesidad de Colom de controlar personalmente el partido, algo que ya no podía hacer en ERC.

Tanto Carod como los demás dirigentes de ERC creen sinceramente que no hay espacio político en Cataluña para dos partidos independentistas de izquierda y auguran que Colom se situará en el ámbito del centro derecha. El diputado autonómico Josep Huguet, hasta hace poco principal asesor ideológico de Colom, expresó su convicción de que el nuevo partido "no es más que el chiringuito que [Colom y Rahola] se han montado como transición para desembocar en otro".

El tono casi versallesco que tuvieron las primeras acusaciones cruzadas el martes subió ayer. Carod calificó al nuevo partido como "escisión de cargos y sueldos", como "aventura hacia la nada" e intento de "dinamitar económicamente" al independentismo de izquierdas.

Colom y Rahola negaron en redondo que su abandono de ERC sea un acto individual e insistieron en que la decisión de formar otro partido independentista es "un hecho político colectivo". En repetidas declaraciones radiofónicas explicaron que el código ético de ERC está pensado para fugas individuales y que por esta razón no les es aplicable.

Rahola explicó que la escisión es fruto de que una parte del partido entendió que la convivencia "era imposible por los comportamientos poco éticos [de los rivales internos] que no han permitido el diálogo". Agregó que se fraguó durante el verano, pero que no se llevó a la práctica de forma planificada.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Polémica por el dinero

Las principales acusaciones, sin embargo, son las económicas. Carod admitió ayer que las deudas de ERC con los bancos ascienden a unos 550 millones de pesetas y que la marcha de los escindidos supone una merma del 40% de los ingresos.Estos cálculos fueron desmentidos por el anterior secretario de organización de ERC, David García de Enterría, uno de los que se ha marchado del partido. Según él, ERC debe 550 millones a los bancos, de los que unos 250 se arrastran de la etapa anterior al liderazgo de Colom, que se inició en 1989. El partido tiene, explicó, unos ingresos medios de 20 millones al mes, de los que sólo perderá unos 4 millones con la marcha de los escindidos.

Estos ingresos aseguran, dijo, que ERC pueda devolver antes del próximo ciclo electoral los créditos que no corresponden a la deuda histórica. Ésta tiene unas condiciones distintas, a largo plazo. García de Enterría recordó que Colom accedió a la secretaría general con unos ingresos medios mensuales de 15 millones y ahora estos ingresos son de 20 millones.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_