Israelíes y palestinos se encierran a negociar hasta lograr un acuerdo
Israelíes y palestinos se volvieron ayer a sentar a negociar el proceso de paz. Esta vez fue en Erez, puesto fronterizo entre Gaza e Israel, y, según lo pactado la pasada semana en Washington, seguirán encerrados hasta que haya algún acuerdo, en particular sobre la retirada israelí de Hebrón. El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, arrojó un jarro de agua fría sobre las pobres expectativas de los palestinos al declarar que no tiene fecha para una evacuación que debía haberse producido ya hace seis meses.
El secretario de Estado norteamericano, Warren Christopher, quiso estar en la zona para dar prueba del interés de Washington por el tambaleante proceso de paz y volvió a chocar con el duro Netanyahu. "No doy fecha [para la retirada de Hebrón]. La satisfactoria conclusión de la negociación será la fecha", declaró el inmutable primer ministro israelí ante un Christopher que no pareció haberle presionado mucho y que simplemente le instó a que cumpla los acuerdos con los palestinos porque ése es "el mejor modo de restablecer la confianza".Netanyahu, además, volvió a sugerir que "dentro del ámbito del acuerdo [de Oslo] existente se hagan algunos ajustes", lo que se interpreta como el deseo israelí de mantener algún tipo de presencia en Hebrón, donde unos 450 sionistas radicales se niegan a pasar a ser controlados, junto con más de 100.000 palestinos de la ciudad, por la Autoridad Nacional Palestina de Yasir Arafat. "Si no se van pronto, juro que habrá una castástrofe", augura el alcalde, Mustafá Natche.
El primer fruto de las negociaciones de Erez, presididas por Dennis Ross, el emisario especial norteamericano, fue crear dos comisiones: una para tratar de la nueva fecha de la retirada de Hebrón y otra que abordará cuestiones de seguridad. La Unión Europea ha ofrecido a ambas partes asesoría y consulta.
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