¿Por qué sólo fotos de palestinos disparando?

El 27 de septiembre pasado, este diario, con motivo del conflicto palestino-israelí, publicó cinco fotos, y en todas ellas aparecían sólo palestinos disparando contra los israelíes. José Carlos Bermejo Parras, de Campo de Criptana (Ciudad Real), comentando esta información gráfica de EL PAÍS, se ha dirigido al director del periódico preguntando: "¿Qué hacían los soldados israelíes, además de recibir los disparos de los palestinos? ¿Tan difícil les fue a sus redactores encontrar alguna fotografía de los soldados israelíes disparando?".A su vez, Angel Cerviño, de Vigo, subraya, en carta al Defensor del Lector, que tras los cinco muertos del primer día, todos ellos palestinos, el resultado del día siguiente era ya de 56 muertos, 45 de ellos palestinos, como lo eran también la mayoría de los mil heridos. Y comenta: "Aun aceptando lo novedoso de algunas de estas imágenes, la discordancia entre lo acontecido y lo representado gráficamente es tan grande, tan burda la reiteración y la insistencia, que nos vuelve suspicaces. Y nos preguntamos: ¿quién eligió las fotos?, ¿con qué criterios?, ¿qué discurso trata de articular EL PAÍS con ese correlato visual que se superpone a los acontecimientos desvirtuando su contenido? Si hay respuestas a esas preguntas, creo que el Defensor del Lector está obligado a manifestarlas

En la misma línea, Emilio Barrera, de Madrid, ha querido subrayar que "las cinco fotografías muestran el horror de la guerra, pero sólo en manos de uno de sus bandos", y escribe: "Tras leer las páginas de su periódico no he visto [gráficamente] los disparos israelíes, mucho más certeros y, probablemente, numerosos puesto que cayeron 69 seguidores de Arafat". Y añade: "Evidentemente, es difícil que un diario con el prestigio internacional y la calidad informativa que ostenta el suyo, no pudiera acceder en el mercado de la imagen a las fotografías en las que aparecía el otro bando ejecutor. Las grandes agencias, que sirven a los informadores televisivos de medio mundo, ofrecieron dichas imágenes".

Concluye el lector diciendo: "No sé si es responsabilidad del redactor jefe de política internacional, del jefe de fotografía o de ambos; si ha sido por no haber hecho una buena selección que completara gráficamente la información o por no tener la suficiente gama de proveedores como para garantizar la aplicación del Libro de estilo de ese diario".

Sin duda que EL PAÍS tuvo los mismos medios gráficos ese día de las grandes agencias que los demás diarios españoles, los cuales, en general, fueron más plurales en su información gráfica. A la vez, el Defensor del Lector está convencido de que en modo alguno hubo por parte del periódico intencionalidad política en dicha elección unilateral de fotografías ese día central de la contienda, ya que ello queda bien demostrado con la línea que en dicha información del conflicto palestino-israelí ha seguido siempre este diario. Si acaso, este diario fue el que intuyó desde el día anterior, abriendo con ello en primera, que el conflicto abierto iba a ser muy importante.

Por ello, pienso que los motivos tuvieron que ser otros y con toda probabilidad más sencillos y contingentes de lo que pueda parecer a primera vista. Los ha expuesto así el redactor jefe de la sección de Internacional, Luis Matías López, interpelado por este departamento: "Las protestas de los lectores por el tratamiento gráfico de la última crisis de violencia en Oriente Próximo, que sugiere que se ha efectuado en clave antipalestina, me ha dejado perplejo, pero no porque crea que están totalmente faltas de razón, sino porque es más frecuente que se acuse a este diario de todo lo contrario".

"Tienen razón los lectores que observaron el tipo de fotos que se publicaron el día 27, y admito. que se debió ofrecer ese día un despliegue gráfico más políticamente correcto. La única explicación, que no justificación, es que elegí, junto a la responsable de la sección de Fotografía, Marisa Flórez, las imágenes que me parecieron más espectaculares".

Matías continúa: "No obstante, considero que, para evaluar correctamente el despliegue fotográfico, no basta con tomar un solo día, sino los cuatro en que se concentró la explosión de violencia".

"Día 26 de septiembre: gran fotografía en primera página en la que soldados israelíes detienen, agarrándole por el cuello, a un palestino. En el interior hay dos imágenes: en una, un palestino lanza una piedra con una honda; en la otra, un policía palestino apunta a soldados israelíes".

"Día 28 de septiembre: en la página 2, foto de policías israelíes abriendo fuego en la entrada de la mezquita de El Aqsa. En la 3, foto de palestinos acompañando en Ramala al cadáver de un soldado palestino muerto por israelíes. Y, en la 4, Arafat durante la plegaria del viernes en Gaza".

"Día 29 de septiembre: en la primera página, jóvenes palestinos tiran piedras a los israelíes. En la 2, un palestino ayuda a un policía israelí herido tras volcar su vehículo. En la 3, un policía palestino intenta contener a los manifestantes".

El redactor jefe de Internacional añade: "Sin necesidad de sumar las fotos de cada bando, creo que esta relación hace evidente que el tratamiento gráfico de la crisis no ha sido sesgado. Sacar conclusiones, basadas en un solo día, como que la cobertura ha adolecido de "falta de objetividad", o que ha habido una "burda reiteración" manipuladora me parece apresurado, aunque respeto el derecho de los lectores a expresar su opinión".

Y concluye: "En este caso, además, ha habido un elemento muy relevante y noticioso: si la Intifada fue, simplificando, la lucha de las piedras contra las balas, en esta crisis, el bando palestino también tenía fusiles, y las balas no han sido monopolio de los soldados israelíes. Para muchos palestinos, esto no es negativo, sino un timbre de orgullo. Destacar, con textos y fotos, un hecho que supone un punto de inflexión en el conflicto era obligado".Los lectores pueden escribir al Defensor del Lector o telefonearle al número (91) 337 78 36.