La crisis de la derecha portuguesa amenaza la reforma de la Constitución

Las fuerzas políticas conservadoras de Portugal se encuentran e un estado de coma profundo que amenaza con aplazar la refoma de la Constitución. La crisis estalló durante la noche del martes e el seno del Partido Popular (PP) que ha quedado sin dirección y la deriva tras la dimisión irrevocable de Manuel Monteiro, como presidente del partido y la renuncia del diputado Paulo Portas como portavoz del grupo parlamentario. Al conflicto de los populares se une la crisis abierta por el liderazgo en el Partido Social Demócrata (PSD, de orientación conservadora), qué deberá decidir en su congreso de octubre sobre la continuidad de Marcelo Rebelde Sousa, seriamente cuestionado como máximo responsable del proyecto socialdemócrata, que atraviesa sus horas más bajas tras la década de Gobierno cavaquista (1985-1995).La actual crisis conservador probablemente, no habría adquirido mayor trascendencia si no hubiera reventado en plena campaña electoral de los comicios regionales de Azores y Madeira feudos tradicionales de los conservadores, a menos de un año de las elecciones municipales portuguesas y pendiente de que el Parlamento apruebe la Ley de Presupuestos y la prevista reforma de Constitución.

De hecho, dirigentes conservadores y algunos miembros del Gobierno socialista consideran que crisis de la derecha podría aplazar la revisión constitucional, que debe exigir el máximo consenso

Monteiro, ahora presidente en funciones del PP, responsabilizó Portas de la ruptura interna y invitó a que encabece una candidatura para la presidencia en el próximo congreso extraordinario cuya fecha aún no está fijada. En opinión de algunos políticos conservadores, esta crisis puede enterrar al PP.

El líder del PSD, Marcelo Rebelo de Sousa, no ha querido comentar los problemas surgidos en el seno del PP. Ambas formaciones estudiaban resucitar la histórica Alianza Democrática (coalición de socialdemócratas y conservadores), y Rebelo precisa que en materias municipales, no habrá alteraciones a lo previsto y mantendrán los acuerdos a nivel local".