Yeltsin, internado en un hospital de Moscú para someterse a unas pruebas médicas previas a la operación de corazón
El presidente ruso, Borís Yeltsin, e internado ayer en el Hospital Clínico Central de Moscú por dos días, para realizarle una serie de exámenes médicos previos a la operación de corazón que le practicará a fines de este mes un equipo de especialistas rusos y extranjeros. Helmut Kohl, el canciller alemán, telefoneó ayer Yeltsin y le propuso que en la intervención quirúrgica participaran cardiólogos germanos, cosa que el líder ruso aceptó.Hasta el jueves Yeltsin había estado pasando sus vacaciones en la residencia Rus, situada a unos 95 kilómetros al noroeste de la capital rusa, pero ayer viajó a Moscú para visitar a su esposa Naína, que se encuentra convaleciente de una operación de riñón, y participar en una reunión con médicos. Aparentemente, allí se decidió que el presidente se internara para pasar unos exámenes médicos previos a la operación de bypass (puente cardiaco) a la que se será sometido próximamente. La fecha de ésta será fijada entre el 27 y el 29 de septiembre por un consejo de médicos rusos y extranjeros.
En la operación -que no se sabe cuán peligrosa será, ya que los bypass pueden ser muy diferentes según su grado de peligro para la vida del paciente- también participarán especialistas extranjeros. Concretamente, a propuesta de Kohl, vendrán a Moscú dos médicos alemanes: Axel Haverich, director de una clínica especializada en operaciones de corazón en el Colegio Médico Técnico de Hanover, y Thorsten Wahlers, cardiólogo de la misma clínica.
Después de que Yeltsin hubo aceptado el ofrecimiento del canciller Kohl, éste telefoneó al primer ministro ruso, Víktor Chernomirdin, para tratar los detalles de la participación de los médicos alemanes.
También es posible que el famoso cardiólogo norteamericano Michael DeBakey se una al equipo de médicos que operarán a Yeltsin. DeBakey, que fue el primer médico en el mundo en practicar una operación de bypass en 1964, viajará próximamente a Moscú para participar en un seminario sobre cardiología. DeBakey declaró ayer que todavía no ha sido invitado a tomar parte en la operación, pero que lo hará con gusto si se lo proponen. "Por supuesto que aceptaré y que haré todo lo que me pidan", manifestó.
DeBakey señaló que la intervención "la puede realizar magníficamente el cirujano ruso Renat Akchurin", que trabaja en el Centro Cardiológico moscovita de Yevgueni Cházov, el médico que trataba al líder soviético Leortid Bréznev y que fue ministro de Sanidad bajo Mijaíl Gorbachov. Akchurin hizo a Chernomirdin una operación similar a la que se debe practicar a Yeltsin. DeBakey opinó que la labor de los médicos extranjeros debe limitarse a dar consejos, pero que ésta no puede ser realizada por un equipo internacional heterogéneo, sino por uno que ya tenga "una sólida experiencia de trabajos conjuntos". La operación de bypass en promedio dura una hora y media y el periodo de reahabilitación posoperatorio es de cuatro a seis semanas. Yeltsin no ha cedido temporalmente la jefatura del Estado a Chernomirdin, limitándose a entregarle el control de los Ministerios de Defensa, Interior, Seguridad, Espionaje, Guarda fronteras y Situaciones de Emergencia. El botón nuclear, sin embargo, continúa en su poder.
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