Una sentencia del Supremo facilita el despido por causas económicas

Una sentencia del Tribunal Supremo determina que "no es preciso" que los jueces exijan que el despido sea "una medida absolutamente necesaria para superar la crisis de la empresa: basta con que contribuya a resolver la situación". Los sindicatos, al conocer esta decisión, han vuelto a criticar la reforma laboral del PSOE por entender que fue lo que abrió la vía al abaratamiento del despido. Así lo expresó ayer el secretario general de UGT, Cándido Méndez. "Tuvo manga ancha a la hora de despedir a los trabajadores de este país" dijo.

Cándido Méndez señaló en RNE que esa sentencia del Tribunal Supremo, que facilita el despido por causas económicas, da la razón a las organizaciones sindicales: "Por activa y por pasiva venimos diciendo que la reforma laboral permite despedir a un trabajador a precio de saldo, abriendo un sinnúmero de justificaciones desde el lado del empresario.Esé fallo del Supremo resuelve uno de los problemas que los empresarios venían observando en los juzgados de lo Social, donde buena parte de los jueces les venían exigiendo justificar exhaustivamente la situación de crisis de la empresa y la necesidad de los despidos como solución, según informaba ayer el diario Expansión. En caso contrario, el despido presentado por causas económicas -indemnizado con 20 días por año trabajado- terminaba en improcedente -tiene una indemnización mucho más elevada, 45 días por año trabajado- El fallo rebate otros dictados anteriormente por el Juzgado de lo Social de Pamplona y por el Tribunal Superior de Navarra contra la Compañía General de Carbones, y es la primera del Supremo sobre uno de los aspectos más polémicos de la reforma laboral del PSOE de 1994.

Un estudio del Consejo Económico y Social (CES), que analizó 141 sentencias sobre despidos de juzgados de lo Social a dos años de la aprobación de la reforma laboral, reveló que un 44,6% fueron declarados procedentes y un 36,8% resultaron improcedentes.

UGT y CC OO están estudiando la sentencia para ver la posibilidad de presentar recursos al amparo de la Constitución. En un comunicado difundido ayer, UGT afirma: "La reforma laboral recoge sobradamente mecanismos de ajuste empresarial ante situaciones de dificultades económicas y son totalmente injustificadas las declaraciones empresariales que hablaban de una insuficiencia de la reforma, de que ésta se había quedado corta en materia de extinción del contrato de trabajo y que era precisa una nueva modificación legislativa en la materia".

CC OO de Cataluña considera que esa sentencia "puede abrir un gigantesco boquete para un masivo e indisimulado aligeramiento de las plantillas". El criterio de este sindicato es que la decisión del Tribunal Supremo "va más allá del rigor de la misma reforma laboral, que nosotros rechazamos en su día", y añade que con ella "se amplían los poderes empresariales hasta límites desorbitados".

La Unión Sindical Obrera (USO) también mostró su preocupación por la sentencia y aseguró que, a raíz de ella, va a reclamar al Gobierno la elaboración urgente de una ley que permita a los sindicatos controlar la, evolución económica de las empresas. Esa normativa debería establecer la obligación de las empresas de entregar información a los representantes de los trajadores y así "evitar cualquier tentación de picaresca, cuando no de fraude".

La patronal en cambio ha recibido la sentencia con satisfacción. La Confederación Empresarial vasca (Confebask) cree que "contribuirá a un a mayor efectividad de la reforma laboral en uno de los aspectos donde su aplicación estaba encontrando más dificultades".

La patronal Confebask considera que gracias al fallo del Supremo "sólo será necesario que la situación de una empresa sea negativa, no ya irreversible como hasta ahora se exigía, para que pueda iniciar una reestructuración de plantilla".