Un inconveniente
La nueva estación ferroviaria de Collado Villalba con cinco vías, escaleras mecánicas suficientes para entrada y desalojo rápido de todos los pasajeros, servicio de información de itinerarios en carteles perfectamente visibles, establecimiento para la venta de todo tipo de prensa, bancos metálicos adecuados para la espera y despacho de billetes para todos los puntos del país, da la sensación de ser una de las mejores de España.Sólo tiene un inconveniente: su salida a la antigua y demasiado estrecha carretera de Galapagar en ese lugar, en donde el tráfico automovilístico sigue siendo grande y en donde tratar de poner una acera, por lo menos, para que los que por ella puedan transitar tranquilos, resulta de todo punto imposible. ¿Cómo solucionar pues este asunto? Varias personas, entre, las que me encuentro, opinamos que los 400 metros, aproximadamente, que van desde el puente sobre el ferrocarril, anexo a la salida que tratamos, hasta la primera moderna rotonda de la mencionada carretera, deberían convertirse en peatonales. Con ello, se ahorraría el Ayuntamiento muchos gastos, y los vecinos de las urbanizaciones Parque de La Coruña y de Las Suertes podrían acercarse a la estación andando sin, ningún tipo de peligros.
Por otra parte, estas mismas personas creen que el antiguo edificio de Correos, actualmente abandonado y situado en la cabecera del indicado puente sobre el ferrocarril, debería ser demolido y en su lugar construida una magnífica plaza. Con ello se despejarían los cada vez mayores atascos originados por su emplazamiento.
Señor alcalde de Collado Villalba, con todos los respetos, ¿podrían ser tomados en consideración estos puntos de vista?.-
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