Corona y Constitución

Los problemas personales de la familia real han distraído la atención de las mucho más profundas cuestiones constitucionales que tendrían que ser afrontadas cualesquiera que fuesen las personalidades reales. La monarquía es él pilar de la maquinaria constitucional británica. Los cambios constitucionales afectan inevitablemente al funcionamiento de la Corona. Esto es cierto incluso para la propuesta de retirar a los miembros hereditarios de la Casa de los Lores. (...) La devolución de Escocia es potencialmente un problema mucho mayor. (...) La cuestión galesa es más remota, pero, no obstante, bastante difícil. (...) Estos asuntos de devolución son mucho más importantes que los de la Casa de los Lores; y las cuestiones europeas son incluso más importantes que las de devolución. (...) Si el Reino Unido se desintegra, y la democracia británica se subsume en la burocracia europea, la Corona habrá perdido su función, pero el pueblo británico habrá perdido su libertad. (...) En estas cuestiones constitucionales que podrían cambiar completamente el funcionamiento de la monarquía en el curso de la próxima legislatura parlamentaria, la reina sólo puede tener un consejero jefe, el primer ministro. Lo cual podría presentar un problema. Los intereses constitucionales a largo plazo de- la Corona y los intereses de un partido que está sólo temporalmente en el cargo no son necesariamente idénticos.

1 de agosto