El Gobierno denuncia "irregularidades" en Paradores y encarga una auditoría

El secretario de Estado de Comercio, Turismo y Pymes, José Manuel Fernández Norniella, denunció ayer una "gestión irregular en Paradores Nacionales, por lo que la actual Administración iniciará una auditoría a fondo para conocer realmente cuál es la realidad contable de este organismo". A juicio de Fernández Norniella, "no se trata de que se hayan llevado el dinero, sino de una incorrecta gestión económica".

La situación económica de Paradores que ha transmitido el anterior equipo gubernamental no corresponde con la realidad, según sus responsables actuales para quienes es "urgente y necesario entrar a fondo en la contabilidad de Paradores para ofrecer al mercado la verdadera realidad".Fernández Norniella, acompañado del director general de Turismo, Carlos Díaz, y del presidente de Paradores, Francisco García Bobadilla, señaló como "datos pintorescos" el que Paradores se haya gastado 1.600 millones de pesetas en informática y solamente sean aprovechables programas por valor de 400 millones de pesetas, ya que el resto no tienen utilidad.

Tras señalar que Paradores no cuenta con contabilidad analítica, acusó a los anteriores gestores de encargar trabajos externos por más de 300 millones en labores que podrían haberse realizado desde dentro. Asimismo, se contrataron servicios de arquitectura externa que cobraron 200 millones de pesetas cuando hay un equipo de arquitectos en nómina.

Carlos Díaz señaló que el contrato que hizo el Estado con la sociedad que gestiona Paradores Nacionales está hecho para que Paradores presente beneficios a costa de los Presupuestos del Estado. En este sentido, añadió que "en ningún contrato de gestión turística normal las inversiones y gastos de reposición de utensilios e instalaciones las paga el arrendador (el Estado en este caso). Por ello Paradores dio el pasado año un beneficio de 517 millones de pesetas, pero las inversiones de reposiciones fueron de 1.000 millones en 1995, lo que cambiaría totalmente la cuenta de resultados".

A juicio de Francisco González Bobadilla, la contabilidad de Paradores ha sido maquillada, se ha ignorado totalmente a los directores de los establecimientos y no se ha sabido rentabilizar los servicios centrales. A su entender, los ciudadanos tienen derecho a conocer la situación económica real. Para ello, este organismo se ha dado un plazo de hasta el próximo 7 de noviembre para presentar una auditoría (falta por decidir si externa o interna) que refleje la situación real. Solamente cuando se conozca ese extremo "el Gobierno se hará cargo de la situación y tomará alguna medida sobre la privatización parcial de algunos establecimientos".

Inversiones nuevas

La inversión del Estado en Paradores desde l991 a 1995 ha ascendido a 8.236 millones de pesetas, de los que 4.812 millones fueron nuevas inversiones y 3.424 inversiones de reposición.Otras irregularidades resaltadas por Fernández Norniella se refieren a la realización en los últimos dos años de obras de reforma en los establecimientos turísticos por valor de 1.500 millones de pesetas sin sacarlas a concurso. "Realmente, estamos preocupados por lo que pueda salir de esa auditoría que vamos a realizar a fondo", subrayó Fernández Norniella.

El actual Gobierno considera que Paradores es un gran activo para el turismo y un elemento primordial de su promoción, pero no puede ser un ejemplo de "gestión atípica". El actual equipo de Comercio y Turismo ha cortado de raíz los que califica "planes pintorescos de invertir en Cuba y en México por desafortunados y fuera de lugar". Asimismo, ha puesto en hibernación los proyectos para instalar nuevos paradores en parajes naturales "hasta que no se aclaren algunos datos económicos". Sobre la privatización de algunos de los 85 Paradores, los responsables de Comercio señalaron que "habrá que ver centro por centro".