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Boldon y Fredericks anuncian record

La medalla de oro de los 100 metros puede proporcionar hoy una nueva marca mundial

Santiago Segurola

SANTIAGO SEGUROLA Cuando se acabó el teatro de la preliminar, los astros de la velocidad se quitaron la careta. Ato Boldon, el compacto atleta de Trinidad, realizó 9,95s en la segunda ronda. La marca fue un aviso para todos. Unos respondieron y otros no. El viejo Christie corrió su serie en 10,03 y dejó atrás a Donovan Bailey, que tuvo una salida desastrosa pero se recuperó en la segunda parte de la carrera. El desafío entre todos los favoritos: Frankie Fredericks contestó con una demostración portentosa de autoridad. Con el paso elegante que le caracteriza y con la potencia que le faltaba en años anteriores, estuvo al borde del récord mundial. Se puede hablar así porque se relajó de tal manera en los últimos metros que entró al trotecito. Pero la marca explica el estado actual del velocista namibio: 9,93 y andando.

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La magnitud de las marcas abunda en la idea de que el récord del mundo será derribado hoy en Atlanta. En el ambiente crece la excitación porque nunca se han visto tiempos de este calibre en la segunda ronda de ningún campeonato. Los atietas, que generalmente se tapan y juegan a las máscaras, se decidieron a librar una batalla psicológica de gran calado. Dos salieron beneficiados, Fredericks y Boldon y otros dos mantuvieron su prestigio, Christie y Bailey. Pero los estadounidenses salieron dañados. Jonathan Drummond se hundió en su serie y Mitchell no dio la sensación de estar a la altura de los favoritos. Aunque es un guerrero y su carrera dice que siempre funciona en las finales, Mitchell no actuó con la seguridad que requería la tarde.

Mike Marsh sacó la mejor nota entre los estadounidenses. Precisamente el hombre que parece menos dotado para la carrera de 100 metros. Su dificultosa puesta en acción le obliga a jugarse las victorias en pocos metros, en el último tramo. En su serie fue capaz de remontar al canadiense Surin, pero su actuación no resultó suficiente como para presentar una candidatura a la victoria. La consecuencia de la jornada de ayer es que se avecina una final memorable. Seis o siete atletas pueden bajar de 10 segundos y darse el de que por primera vez ningún estadounidense consiga una medalla.

En la primera ronda apenas se dijo nada. El registro de Davidson Ezlnwa (10.03) parecía indicar que los tiempos serían rapidísimos. Pero entraron los jefes y comenzaron a especular. Frankie Fredericks, el favorito, corrió al trote, al paso tranquilo de un velocista que ha cubierto los 100 metros en 9,86 segundos. En su perezosa carrera hizo 10,32s. Y por ahí estuvieron las marcas de Christie (campeón olímpico y mundial), Donovan Bailey (campeón mundial) y Dennis Mitchell (el rey del bronce).

Visto lo visto, los ocho posibles finalistas y sus posibilidades son los siguientes:

Frankie Fredericks (Namibia).

Primer candidato a la victoria. Atleta elegante que pagaba su falta de potencia, su pobre puesta en acción y un carácter poco agresivo. Ahora está equipado con todo. Invicto durante la temporada. Ha corrido en 9,86 y 9,87s.

Donovan Bailey (Canadá). El último de los caribeños que ha hecho fortuna en Canadá- Campeón del Mundo. Desarrollo tardío. Irregular. A veces corre en 48 zancadas y otras en 52 a causa de una malformación en su cadera izquierda. Otro posible ganador.

Ato Boidon (Trinidad). El más joven del grupo: 23 años. Pequeño -1,75 metros- pero con unas piernas desproporcionadamente largas. Gran aceleración, magnífico competidor. Tiene las cualidades para ser el rey de la velocidad.

Mike Marsh (EE UU). Campeón olímpico de 200 metros. No se siente tan cómodo en los 100. Atleta que aparece y desaparece sin explicación. Discreto en las salidas. Poderoso en las llegadas.

Dennis Mitchell (EE UU). Un guerrero veterano. Estuvo la final de Séul 88. Eterno tercero. Agresivo, rinde bien en las grandes ocasiones, suele jugarse el nulo en las salidas. Sus últimas actuaciones no han sido convincentes. Juega en casa.

Jon Drummond (EE UU). El más joven de los estadounidenses. Se mueve siempre entre 9,98 y 10,05. Buena salida, le falta un poco de potencia en la llegada. Tendrá que subir un peldaño en sus tiempos habituales para ganar la carrera o alguna medalla.

Linford Christie (Reino Unido). Nadie cuenta con él, pero conviene no descartarle. Supremo competidor. Ha ganado todo lo posible. Un modelo de consistencia y de resistencia. Tiene 36 años, es duro de pelar.

Bruny Surín (Canadá). Canadiense de origen haitiano. Excelente velocista, a un paso de los grandes.

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