'Ja tenim equip'
El discurso de Núñez ante Cruyff comienza casi siempre de la misma manera: si Mijatovic y Suker están en el Madrid es porque Cruyff no los quiso en el, Barça. Dos años en blanco tras cuatro Ligas y una Copa dejaron al Barcelona histérico. El presidente y el técnico eran tan incompatibles que al final pareció como si se hiceran la vida imposible. Núñez ha quedado retratado en sus reproches a Cruyff cuando ha fichado a Ronaldo por la cifra jamás pagada por un jugador en el mundo del fútbol: 2.560 millones. Le ha dado a Robson, no la Torre Eiffel que le negó a Cruyff, sino Manhattan.Núñez ha invertido unos 5.000 millones en un sólo año cuando el gasto total en las ocho temporadas en que Cruyff estuvo en el banco del Camp Nou ascendió a 8.562 millones. El presidente creyó que si los 2.000 millones que invirtió en el último proyecto de Cruyff sólo habían servido para hacer campeón al Atlético y, encima, el técnico le pedía para el año que viene a McManaman antes que a Mijatovic, ahora se imponía de forma definitiva el bisturí.
Cruyff, como cualquier otro, cayó víctima del marcador y los directivos le despacharon de la misma mala manera que el técnico más grande en la historia centenaria del Barça les había tratado.
A Núñez no le importa arriesgar siempre que tenga a quien pedirle responsabilidades. Empezó su mandato peleándose por el fichaje de Krankl, rompió el mercado español con la contratación de Alexanco -le llamaban el libero de los 100 millones-, se llevó al Camp Nou a Maradona por la cifra, récord de 1.200 millones y fue él quien mostró en qué consiste el leasing a la hora de fichar a Koeman por 1.000 millones. Núñez le puso a Lattek-Menotti un Barça con Schuster y Maradona; a Venables le compró a Hughes, Lineker, Zubizarreta y Roberto; y a Cruyff le montó nada más llegar un, equipo de 2.500 millones.
Hoy, antes que exponer un nuevo proyecto o amarrarse a una leyenda como lo fue Cruyff o desmantelar al equipo campeón, ha seguido la tesis de los técnicos de la vieja escuela -Bobby Robson tiene 63 años- y se ha dicho que cualquier equipo para ser campeón necesita un portero que pare, un delantero que meta goles y un medio que una al uno con el otro, y justamente por eso ha contratado a Vítor Bala, Ronaldo y Giovanni por 4.500 millones. Los demás, salvo Stolchkov -si el presidente pudiera recuperaría a todos los: que echó Cruyff para intentar demostrarle que el Dream Team campeonaría por encima de cualquier entrenador-, ya estaban fichados en tiempos de Cruyff: Luis Enrique, Pizzi, Blanc.
Núñez, al menos, ya ha conseguido que el hincha culé no se quede en casa, martirizado por el cantar de la nueva alineación del Madrid -Mijatovic, Suker, Seedorf, Roberto Carlos, Secretario, Alfonso-, y diga antes del Gamper: "Ja tenim equip".
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