La economía crece en torno al 2% en el segundo trimestre con signos de despegue del consumo

La economía española crecerá durante el segundo trimestre de este año en torno al 1,9% en tasa interanual, según las cifras que considera el Gobierno para el periodo. Este crecimiento es igual que el registrado en el primer trimestre, de forma que, aparentemente, la economía no habría salido de su impasse; sin embargo, en términos intertrimestrales, la actividad crece por encima de esa cifra. Existen indicadores claros de recuperación de consumo, todavía a ritmo modesto. El Ejecutivo está convencio de que el despegue económico llegará a a hora prevista, a partir de julio.

La economía española registrará un crecimiento interanual en torno al 1,9% en el segundo trimestre del ejercicio, según las evaluaciones oficiales conocidas por EL PAÍS. Este crecimiento del PIB, medido sobre el segundo trimestre de 1995, indica aparentemente que continúa el estancamiento económico; sin embargo, la evaluación intertrimestral, todavía no definida en cifras, confirma que la demanda global está creciendo a un ritmo mayor, como consecuencia principalmente de los indicios que se aprecian de un mayor dinamismo del consumo.Según las nuevas estimaciones, realizadas en función de las cifras conocidas del segundo trimestre, el consumo está creciendo por encima del 2% registrado en el primer trimestre. Por el momento, la percepción de este mayor dinamismo no puede concretarse en cifras muy exactas -no es posible, por ahora, conocer la evolución del consumo de servicios-; pero tanto la disponibilidad de bienes de consumo, como las matriculaciones de automóviles y los indicadores de confianza de los consumidores indican que, muy lentamente, el consumo privado está despegando. De acuerdo con las fuentes consultadas, el despegue (tasas por encima del 3%) no se confirmará hasta el tercer trimestre de 1996.

El análisis de las cifras conocidas hasta junio muestra que las probabilidades de que se produzca una recuperación de la actividad en el segundo semestre de este año son crecientes. Tanto el consumo, como se ha visto, que debe convertirse en el factor decisivo en el relanzamiento económico, como el crecimiento del PIB, empezarán a compararse en el periodo julio-septiembre con períodos del año pasado en los que las tasas de crecimiento fueron menores. Los economistas y coyunturalistas están recuperando la confianza en que el segundo semestre del año registrará una tasa de crecimiento próxima o ligeramente superior al 3%, de forma que el PIB este año se pueda aproximar al 2,5%.

La inversión está parada

En la evolución económica correspondiente al segundo trimestre, las expectativas de la inversión no variarán significativamente respecto al signo que presentaban en el primer trimestre. Así, la construcción no ha mejorado y los indicadores adelantados muestran que continuará la desacelaración de la actividad. Las estimaciones mas probables sitúan su crecimiento por debajo del 1%. En cuanto a la inversión en Bienes de Equipo, mantendrá tasas de crecimiento en torno al 6%. Es una demostración fehaciente de que la inversión no será el factor que determine la recuperación en el segundo semestre, aunque algunos expertos indican que las construcción empezará a mostrar pronto signos de relanzamiento.El Gobierno coincide en estas apreciaciones optimistas con las que ya han emitido otras instituciones. El Consejo Económico y Social (CES), en su informe correspondiente al mes de julio (EL PAÍS, 7-VII-96) estima que el consumo se está recuperando y que la mejora del clima industrial es más que notable.