Un 'hiper' abre la guerra de la gasolina al rebajar un duro el litro

Alcampo ha traído a Madrid la guerra de las gasolineras, cuyos primeros disparos ya han herido levemente a los precios del combustible en Cataluña, Galicia, La Rioja y Valencia. El centro comercial inaugurará hoy su primera estación de servicio, en el Parque Corredor de Torrejón de Ardoz, y lo hará con una rebaja de cinco pesetas por litro de combustible. O lo que es lo mismo: las 118,3 pesetas por litro de gasolina súper pasarán a costar en los surtidores de Alcampo 113,3; la gasolina sin plomo pasa de las 112, 10 pesetas a las 107,11 y el gasóleo, de 91,5 a 86,5 pesetas. Como en las regiones mencionadas, la gasolina más barata la ofrece un hipermercado.Con las tarifas en la mano, un portavoz de Alcampo intentaba ayer quitar hierro y polémica a este abaratamiento de los precios del combustible. "No pretendemos entablar ninguna guerra con la competencia. Simplemente, completar en nuestros centros comerciales la oferta de servicios al cliente y continuar con nuestra filosofía de ofrecer precios sensiblemente más inferiores a los del mercado".

Durante el primer mes, la estación del Parque Corredor de Torrejón -inaugurado el pasado mes de diciembre- mantendrá la rebaja de un duro por litro de gasolina súper, sin plomo o gasóleo. Después será de tres o cuatro pesetas por debajo del precio de mercado. "Podemos garantizar a nuestros clientes que siempre será más bajo que en el resto de las estaciones", continuó el responsable de Alcampo.

La gasolinera funcionará como autoservicio: el cliente dispondrá de cuatro distribuidores y cuatro mangueras. El pago se podrá efectuar antes o después de llenar de combustible el depósito. En ventanilla o en máquina. El funcionamiento lo explican en la propia empresa: "El sistema es muy sencillo. De pospago, se abona en una ventanilla después de echar la gasolina. Y el prepago, que funcionará por la noche, y que consiste en introducir el importe en una máquina y luego servir la gasolina".

Ésta no es la primera vez que Alcampo rompe la baraja de precios en las gasolineras españolas: hace cuatro años abrió una estación en Ferrol (La Coruña), en 1993 lo hizo en Alboraya (Valencia) y hace un par de años que inauguró otra gasolinera en Logroño.

La de Madrid pronto tendrá compañía. Muy cauta, la empresa prefiere no adelantar pistas de dónde estarían ubicadas las otras estaciones de servicio de la región. "Se están estudiando problemas y detalles como la seguridad y la edificabilidad. Pero abriremos en todos los centros que podamos", señaló el portavoz de Alcampo.

Esta modalidad de venta de carburantes en las estaciones de servicio de los hipermercados y centros comerciales, que utilizan la rebaja de los precios sobre los máximos fijados como reclamo comercial, es una fórmula muy habitual en algunos países europeos. Por ejemplo, estas gasolineras en Francia acaparan el 50% de las ventas totales de combustible.