Los últimos gobernadores serán nombrados en 15 días

El Gobierno nombrará antes de 15 días, y por última vez, gobernadores civiles. Su poder será bajo, de acuerdo con la nueva Ley de Reforma de la Administración Periférica del Estado (LOFAGE), según aseguró ayer el ministro para las Administraciones Públicas, Mariano Rajoy. El proyecto de ley, cuyo aspecto más llamativo es la sustitución de los gobernadores por subdelegados, entrará en la comisión de subsecretarios la próxima semana y sólo queda un punto importante por dirimir: de qué ministerios dependerán los delegados.La LOFAGE es el primer proyecto pactado por el Gobierno y CiU que pasará por el Consejo de Ministros y la primera piedra de la reforma de la Administración periférica que el PP pretende impulsar y denomina Administración Unica. Rajoy apuntó ayer que "España se encamina hacia un modelo federal con el reconocimiento de hechos diferenciales".

La toma de posesión de los nuevos delegados del Gobierno -nombrados en el Consejo de Ministros del viernes-, en La Moncloa, adquirió ayer un carácter simbólico, de realce de la reforma de la Administración periférica. Además de Rajoy y del titular de Interior, Jaime Mayor, asistieron el vicepresidente Francisco Álvarez Cascos y José María Aznar.

Álvarez Cascos aprovechó para dar realce a los nombramientos: "No sólo se produce un relevo de personas, sino que se pone en marcha un proyecto de reforma y modernización de la Adnministración periférica del Estado".

El Gobierno ha resuelto en los últimos días el contencioso que tenía pendiente con la Generalitat catalana, que, en un principio, pretendía que no se nombraran gobernadores. Aznar y Rajoy han optado por elegir una vía media: se nombrarán los gobernadores de acuerdo con la ley vigente, por Consejo de Ministros, pero con un perfil bajo, con vistas al nuevo proyecto de ley que el Gobierno quiere zanjar antes del verano.

El Ejecutivo tiene prácticamente ultimado el proyecto de ley sobre la base de la LOFAGE que su predecesor socialista aprobó en su penúltimo Consejo de Ministros, anterior a la disolución de las Cámaras. Según el nuevo proyecto de ley, serán los delegados del Gobierno quienes nombren a los gobernadores, que pasarán a llamarse subdelegados y carecerán de perfil político: sólo serán altos funcionarios del Estado.

Rajoy admitió ayer que el aspecto más relevante que queda por resolver es de qué ministerios dependerán los delegados. Además de Interior, que seguirá teniendo competencias en materia de orden público, queda por zanjar el reparto de papeles entre los ministerios de la Presidencia y Administraciones Públicas.

La LOFAGE se completará con una nueva Ley de Gobierno que, según manifestó Rajoy, el Ejecutivo también abordará en las próximas semanas. Dicho proyecto tendrá que zanjar si los delegados tendrán competencia para acudir a las sesiones del Consejo de Ministros en las materias que afecten a sus comunidades.