Gobierno encuentra graves obstáculos para ampliar el recorte en la Administración

El Gobierno del PP va a poder ir poco más allá de la poda de 56 altos cargos realizada en su Consejo de Ministros del 10 de mayo. Ahora trata de ampliar el recorte entre el personal eventual de asesores de los ministerios y sus auxiliares (473 en la etapa socialista). Pero también en este terreno las habas están contadas. Otra posibilidad, la de los funcionarios de libre designación (6.483), presenta obstáculos insalvables. El Gobierno del PP ahora ya no se compromete con cifras, tras la rectificación que hizo al admitir que en la Administración no hay 5.300 altos cargos, sino 450.

La prometida reducción de altos cargos del PP cuando estaba en la oposición -5.300 anunciaba en junio de 1994, y 6.110 en febrero de este año, el diputado y responsable del PP del área de Administración Pública, Manuel Núñez- ha quedado drásticamente paralizada cuando los populares han ganado el Gobierno. En la primera tacada, el balance provisional es de 56 altos cargos (de directores generales hacia arriba, todos nombrados por el Consejo de Ministros) suprimidos sobre unos 450. Lejos incluso de los anunciados por el secretario de Estado de Comunicación, Miguel Ángel Rodríguez, que al finalizar el Consejo de Ministros del viernes adelantó la cifra de 138.La razón de este contraste entre realidad y deseo es que el trabajo, dirigido por Rodolfo Martín Villa y Manuel Núñez desde el PP, tenía como móvil regresar al diseño anterior a la etapa socialista, cuando gobernó la UCD. Expertos consultados aseguran que no se pueden comparar las épocas debido al desarrollo del Estado de bienestar y a la incorporación de España a la Unión Europea.

El balance real y provisional, una vez cuantificado ministerio por ministerio, arroja una cifra similar de secretarios de Estado de la etapa socialista a. la que ahora se inicia (21); una reducción de 4 secretarios generales (de 31 a 27) y de 52 en directores generales. En total, 56.

El recorte realizado hasta el momento, con la supresión de las direcciones generales, no supera los 250 millones de pesetas. Estos datos los recoge un estudio realizado por la Administración saliente y que suscribe el Grupo Parlamentario Socialista.

Ahora el Gobierno del PP trata de escarbar en el terreno del personal eventual, sobre todo asesores de ministros y auxiliares, pero tampoco puede obtener un recorte sensible. En cualquier caso queda alejadísimo de los 79.000 millones que prometió cuando dio a conocer su proyecto de Ley de Gobierno en 1994.

La Administración socialista contó con 473 efectivo como personal eventual, repartidos en 132 funcionarios del nivel 30, el máximo de la Administración; 5 del nivel 29; 44 del nivel 28, y 292 de otros niveles. Entre un 70% y 75% de ese personal es funcionario, con lo que la reducción ya tiene unos límites importantes.

Pero, además, el nuevo Gobierno del PP también necesita del personal eventual -asesores y auxiliares que les acompañan- para cubrir la tarea de los ministros. El Consejo de Ministros del pasado viernes decidió reducir de 10 a 7 el número de asesores por ministro, y los elevó al rango de subdirector general. Pero los ministros del Gobierno socialista tenían 7 asesores de media. Alguno, como Juan Alberto Belloch, subía hasta 8 ese número, pero no es menos cierto que abarcaba dos carteras: Justicia e Interior. En todo caso, la reducción por este capítulo, que el PP calculó en la oposición a 200, no puede ser abultada. Podrá conocerse cuando culmine el proceso de reestructuración y su cuantificación definitiva cuando se presenten los Presupuestos para el año 1997.

Subdirectores generales

En cuanto a la reducción del gasto por la vía de los funcionarios de libre designación, sus posibilidades con también muy limitadas. La cifra alcanza la 6.483 personas, todos ellos funcionarios. Este personal se reparte en 1.404 del nivel 30 con categoría de subdirectores generales; 928 del nivel 29; 1.242 del nivel 28 y 2.909 como "otros". Los subdirectores generales corresponen al nivel más alto de la Administración, como diplomáticos de carrera, abogados del Estado, secretarios generales de los gobiernos civiles, etc., y son nombrados por concurso.Expertos de la Administración saliente aseguran que la única posibilidad de recortar gasto en este personal es por la vía de la reducción del sueldo; por ejemplo, con la supresión de la categoría de "subdirectores generales", porque todos ellos son funcionarios de la Administración. Pero el PP no ha apuntado nada en esta dirección desde que gobierna. En la oposición anunció la reducción de subdirectores generales a 925.