Santer propone a los agentes sociales un 'plan Marshall' contra el paro

"Ojalá aplicáramos a la lucha por el empleo la misma energía que caracterizó la reconstrucción después de la guerra". Jacques Santer, presidente de la comisión Europea, defendió ayer, durante sus reunión con representantes de los agentes sociales europeos, la necesidad de lanzar lo que él llamó en su día Pacto europeo de confianza para el empleo y que, siguiendo su razonamiento de ayer, más se parece ya a una reedición del plan Marshall que relanzó la economía europea tras la Segunda Guerra Mundial. En esta ocasión será exclusivamente a la europea.

Jacques Santer, presidente de la Comisión Europea, inauguró ayer en Bruselas una mesa redonda que unirá durante dos días a patronales y sindicatos de toda la Unión, para discutir a puerta cerrada cómo acabar de una vez con el desempleo en Europa.En su discurso de apertura, que sí trascendió a los medios de comunicación, el presidente de la Comisión lanzó un mensaje preñado de optimismo, en el que prevaleció por encima de todo el llamamiento a la acción frente a la pasividad. "Si tenemos que hacernos un reproche colectivo tendría que ser el de la excesiva prudencia y la falta de dinamismo. ¡No podemos mirar el futuro a través de un retrovisor!", dijo, y elogió los valores que anidan en Europa para ver el futuro con optimismo: "Una base científica y técnica sólida, un alto nivel de educación, un sistema político estable y, por supuesto, los beneficios de la unificación europea. Y añadiría también un logro esencial: un modelo de sociedad original basado en el dinamismo de los individuos y la solidaridad".

Compromisos financieros

El problema, admitió, es que a pesar de estas virtudes en Europa cunde el pesimismo y la falta de confianza. Los expertos dicen que el viejo continente está enfermo, y Santer se rebela ante esa afirmación: "¡Es absurdo! Recordad lo que hizo Europa después de la Segunda Guerra Mundial. Ojalá aplicáramos a la lucha por el empleo la misma energía que caracterizó la reconstrucción después de la guerra". Santer, que se mostró convencido de que la cumbre de Florencia, en junio próximo, dará un espaldarazo político en favor de los compromisos financieros que la Comisión busca para luchar contra el desempleo a través de inversiones en infraestructuras -por valor de unos 1.700 millones de ecus (2,68 billones de pesetas)-, desgranó las grandes líneas del pacto por el empleo:1. Mantener la política de convergencia: "No hay otra elección".

2. Acabar el mercado único: "Hay que suprimir los obstáculos que subsisten".

3. Infraestructuras europeas: "Se trata de dotar a nuestro espacio común de las infraestructuras y los medios que le permitan alcanzar una posición competitiva en el escenario internacional".

4. Fondos estructurales: "Su principal papel es el de mantener la solidaridad con las regiones. Pero han de servir para algo más ( ... ): nos han de ayudar a anticipar los cambios, a desarrollar las innovaciones, a hacer emerger nuevos empleos en sectores no explorados, (etc... )".

5. Modernizar el mercado laboral: "El reto es reformar en cada país el sistema nacional de empleo: organización y legislación del trabajo, coste del trabajo, educación y formación profesional".

6. Mantener la ética. "La competitividad no puede justificar todos los excesos".