Un empresario alemán paga 2.500 millones a sus secuestradores
El multimillonario y mecenas con inquietudes sociales Jan-Phillipp Reemtsma, de 43 años, recuperó ayer su libertad, tras 33 días de secuestro y de la entrega de 30 millones de marcos (2.500 millones de pesetas), el mayor rescate pagado en el país.Reemtsma que había sido secuestrado en su residencia en un elegante barrio de Hamburgo, se encuentra en buen estado de salud y en paradero desconocido, para reponerse de los 33 días de cautiverio en un sótano minúsculo. Los secuestradores le mantuvieron atado a la pared con una cadena de unos dos metros. El secuestrado declaró a la policía que no le habían tratado mal.
La policía ha iniciado la caza y captura de los secuestradores con un máximo de efectivos, tras haberse mantenido inactiva durante las cinco semanas de secuestro. Durante ese tiempo la prensa observó un silencio absoluto y no informó nada del secuestro, porque así lo habían exigido los secuestradores bajo amenaza de asesinar a la víctima. A través de un número de teléfono se puede escuchar la voz de uno de los secuestradores y la policía pide que la población facilite pistas para capturar a los criminales.
Reemstma heredó la propiedad de¡ segundo consorcio tabaquero alemán y vendió en 1980, junto con su madre, la participación mayoritaria en la empresa por una cantidad que se estima en 300 millones de marcos (25.000 millones de pesetas al cambio actual). El multimillonario se distinguía por sus inquietudes intelectuales y sociales, que le llevaron a fundar un instituto de investigación social que investigaba, entre otros temas las causas de la pobreza o los crímenes del nazismo.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.