Un histórico HB 'controlado' por KAS

Jon Idígoras Guerrikabeitia (59 años), en carcelado el miércoles por su presunta colaboración con ETA, es uno de los pocos históricos de la coalición independentista que quedan en la actual dirección de Herri Batasuna (HB) y que no pertenece a la: Koordinadora Abertzale Socialista (KAS). En los últimos cuatro años KAS ha ido copando todos los cargos directivos de HB hasta llegar a ser quien marque la línea política de la coalición. En la anterior Mesa Nacional Idígoras estuvo a punto de perder su puesto de portavoz. Su fidelidad a la organización y sus escasas críticas a la misma le han permitido compartir esa tarea con el navarro Floren Aoiz, un militante de KAS que provenía de las filas de Jarrai, una trayectoria bien distinta a la de ldígoras.Bajo su apariencia física de dureza y agresividad se esconde un hombre de trato afable en las relaciones personales. En la actual dirección de HB ha llegado a ser el eslabón más débil del grupo y es uno de los pocos personajes que marcan la unión entre la HB que surgió a finales de los 70 y la actual. A pesar de sus muchos años de militancia, desde que fue nombrado coportavoz con Floren Aoiz ha tenido que demostrar que puede llegar a defender posiciones tan duras como las que mantienen sus compañeros de KAS. En ocasiones, sin embargo, se ha constatado la falta de sintonía entre ambos portavoces. En más de una comparecencia pública algunas de las manifestaciones de Idígoras han sido corregidas por el joven dirigente de KAS.

El militante histórico de HB ha tenidoque demostrar dentro de casa que su veteranía y su militancia política pesan más que algunos deslices verbales que ha tenido en conversaciones con periodistas, en las que ha llegado a criticar de alguna manera la actividad de ETA. Fue también polémica la entrevista que mantuvo en televisión con el periodista Jesús Quintero, en la que dijo: "Yo entiendo que las violencias no tienen ningún objeto ni deben tener ninguna cabida en una sociedad racional".

Idígoras es un hombre apreciado dentro de la militancia de HB por su imagen de viejo luchador que ha defendido desde su puesto de portavoz con el mismo entusiasmo todos los discursos marcados por la dirección, desde las campañas contra intereses de Francia, pidiendo a los vascos que no compraran productos de ese país, hasta la petición del voto para la coalición independentista argumentando que era lo mismo que votar a ETA Nacido en Amorebieta (Vizcaya), Idígoras ha sido, detenido en siete ocasiones. Estuvo en la cárcel en los años 1958, 1968 y 1972 por su participación en las protestas obreras de su pueblo natal. Militó en las HOAC (Hermandad Obrera de Acción Católica) y en el Frente Obrero de ETA, hasta que se exilió en Francia, donde vivió desde el 74 al 76. Durante muchos años ha estado viajando los fines de semana al país vecino, donde residía su esposa.

Idígoras trabajó en la construcción, donde combinaba su trabajo laboral con la, política. Fue fundador del sindicato LAB y entró a militar en HB de manos del médico asesinado Santiago Brouard, que fue el que le convenció para participar activamente en esa organización. Es miembro de la Mesa Nacional desde su fundación y ha sido diputado en el Congreso y en el Parlamento Vasco desde 1980. En las dos últimas legislaturas ha sido el portavoz de HB en el Congreso de los Diputados.

Participó y fue juzgado, junto a otros dirigentes de HB, por cantar el Eusko gudariak (himno al luchador vasco) durante un discurso del rey Juan Carlos en la Casa de Juntas de Gernika, en 1981. sufrió un atentado en el hotel Alcalá, de Madrid, en el que falleció su compañero Josu Muguruza y en el que el abogado Iñaki Esnaola sufrió heridas de gravedad.

El dirigente de HB se considera a sí mismo como un hombre de escasas relaciones familiares, y dice que los años dedicados a la lucha política y sindical y sus escasos recursos económicos le limitaron sus posibilidades de estudiar. Es conocida su afición a los toros; en su juventud toreó varias becerradas tras los nombres de Morenito de Gane o Txikito de Amorebieta. Actualmente es aficionado a la pesca, la micología y los paseos por el monte.

Idígoras ha llegado a manifestar que en política las discrepancias son legítimas y necesarias. Pese a ello, desde hace más de veinte años milita en una coalición en la que no se pueden difundir al exterior opiniones personales contradictorias con la colectividad. Y en la que, según consta en su actual ponencia política, no queda resquicio para la disidencia ya que HB no tiene más opinión que "la determinada democráticamente por el conjunto de la militancia, o en su defecto por la que emitan los órganos de dirección".