HB reta al poder judicial y decide que Idígoras no comparezca ante Garzón
La mesa nacionl de Herri Batasuna (HB) asumió "colectivamente" el reto de no comparecer ante los jueces "del Estado español" e ignorar la prohibición que pesa contra el vídeo de ETA que la coalición difunde en sus actos electorales. El juez Baltasar Garzón dictó ayer la orden de detención contra Jon Idígoras, representante legal de la coalición Herri Batasuna (HB), brazo político de ETA. Esta decisión, adoptada al no comparecer Idígoras ante la Audiencia Nacional a las seis de la tarde, tal como le había emplazado el magistrado, se produjo tras declarar secretas las diligencias y previa consulta a los fiscales. Anoche Idígoras seguía en libertad.
El desafío de HB incluye la advertencia de que la adopción de medidas contra Idígoras o cualquiera de los otros 25 integrantes de su dirección "será considerada como un acto de venganza sin ninguna legitimidad". La autoproclamada rebelión contra las instituciones judiciales fue violada ayer mismo por dos abogados de la coalición, Kepa Landa y Jone Goinicelalla, al presentar en la Audiencia Nacional un recurso en el que piden a Garzón que reforme el auto en el que prohibía la difusión del vídeo de ETA y ordenaba la comparecencia de Idígoras como imputado. La difusión del vídeo con las propuestas de ETA -considerada por Garzón como un presunto delito de "colaboración activa" con la banda terrorista- es para Herri Batasuna "un acto de ejercicio legítimo de la libertad".Horas después de que Garzón dictase la orden de detención contra Idígoras, el líder de HB hacía "vida normal" y, sonriente, sacaba a pasear a su perro ante los periodistas en Amorebieta (Vizcaya), donde reside. La Ertzaintza no había ejecutado anoche la orden de arresto.
