La investigación achaca a "la fatalidad" la muerte de dos esquiadores en La Pinilla

A falta de testigos, la muerte de dos esquiadores madrileños el sábado en la estación de La Pinilla (Segovia) en el mismo punto, pero con media hora de diferencia, es una incógnita. La dirección de La Pinilla -que depende de la Junta de Castilla y León y de la Caja de Ahorros de Segovia- se ha limitado, en un escueto comunicado, a dar el pésame a los familiares. Son los primeros muertos en los 28 años de historia de la instalación. Los investigadores, a falta de datos concretos, consideran una fatalidad el hecho de que se produjeran dos muertes en tan sólo media hora. El Gobierno Civil de Segovia espera al informe de la Guardia Civil.Según esta institución, sobre las tres de la tarde del sábado falleció Nieves Subtil Martín, de 34 años, que esquiaba por la pista denominada El Mirador. Medía hora más tarde murió en la misma zona Joaquín Cano Soriano, de 32 años. Ambos acabaron junto al pilar de un remonte que estaba protegido con una colchoneta.

La primera hipótesis es que los fallecidos estaban bajando por la pista El Mirador -señalizada como roja (difícil)- y debido a una caída cerca del inicio del descenso fueron a parar a la pista llamada Negra -calificada como muy difícil-, que se encontraba cerrada por hielo. Desde esta última pista los fallecidos pudieron precipitarse hasta otra de transición, conocida como La Hoya, donde se encuentra el pilar. La investigación también apunta a que Subtil, cuyo esposo iba esquiando unos metros más adelante, pudo fallecer de un golpe en la cabeza al caer en la pista El Mirador. Su cuerpo se deslizó hasta el pilar de La Hoya tras saltar la pista Negra.En la estación han declinado hacer comentarios porque ningún empleado fue testigo. La dirección de la estación tuvo que levantar el domingo parte de la pista Negra para inutilizarla porque había personas bajando por ella a pesar de estar cerrada.