El Gobierno bosnio pone en libertad a cuatro de los ocho militares serbios detenidos

El Gobierno bosnio puso ayer en libertad a cuatro de los ocho militares serbobosnios en su poder. Los soldados fueron conducidos al puente de la Fraternidad, desde donde cruzaron al barrio de Grbavica, aún bajo control serbio. A pesar del gesto, aún quedan en su poder otro cuatro militares; entre ellos, un general y un coronel, que ayer fue visitado por su mujer en la prisión central de Sarajevo.

HoIbrooke amenaza a Karadzic y MladicEl Gobierno serbobosnio ha decidido por el momento no reanudar los contactos con los bosnios musulmanes, pero sí con Ifor, la fuerza internacional en Bosnia-Herzegovina, suspendidos el viernes por el general Ratko Mladic, tras la detención de estos militares. lfor, ante el aumento de la tensión, ha optado por mejorar su seguridad. "Siempre que tenemos una indicación de que el riesgo se incrementa tomamos más medidas de seguridad", explicó el capitán Leonard Capello., portavoz de la OTAN en Sarajevo.En Budapest, en vísperas de su viaje a Sarajevo, donde se le espera hoy, el plenipotenciario de EE UU en la zona, Richard Hoolbroke, -la liberación de los cuatro es un gesto hacia él-, recordó a los serbios que el jefe militar de la fuerza internacional para la aplicación de los acuerdos de Dayton, almirante Leighton Smith, tiene plenos poderes para replicar a cualquier provocación. Entre estos poderes está el uso de la fuerza.

El Ejército serbobosnio emitió ayer un comunicado en el que exige la libertad de todos los detenidos. El jefe político de los serbios de Bosnia, Radovan Karadzic, fue más lejos al decir que el arresto de sus camaradas representaba "una reanudación de las hostilidades". La liberación de todos estos hombres se ha topado con una dificultad importante. El Tribunal Internacional de La Haya, al que le compete los crímenes de guerra en la antigua Yugoslavia, ha solicitado al Gobierno de Sarajevo que no libere al general y al coronel en espera de conocer si están o no implicados en crímenes.

Este asunto se ha convertido en un pulso. Si Karadzic y Mladic lo pierden, sus cabezas estarán en juego. El ministro alemán de Exteriores, Klaus Kinkel, lo dejó entrever ayer al solicitar al Tribunal de La Haya que lance una orden de captura internacional contra Karadzic y Mladic.

Mientras, en un intento por apaciguar la tensión en Mostar, ayer llegaron a Medjugorje, donde se halla el cuartel general de las tropas españolas, un centenar de policías croatas enviados por Franjo Tudjman para colaborar con la policía internacional. No muy lejos, en el puerto croata de Ploce, desembarcaron los 500 soldados españoles encargados de reforzar a los 1.200 ya desplegados en la zona.