Aznar promete "no vender a los españoles ninguna moto que no pueda funcionar"

"No estoy dispuesto a vender a los españoles ninguna moto que no pueda funcionar. Para vender motos sin ruedas ya están los de ahora". José María Aznar aprov(whó, una expresión coloquial juvenil, rodeado como estaba de Ia junta directiva de las Nuevas Generaciones del PP, para enfatizar que él no va a lanzar mensajes electorales confusos o engañosos, sino que va a decir la verdad. Como ejemplo puso su actitud ante la mili: la mayoría del PP, confesó, sería partidaria de su supresión, pero la responsabilidad exige plantear la reducción del servicio militar a seis meses. Desde su perspectiva, el Ejército del Aire, la Marina y la Fuerza de Acción Rápida deben estar formados por profesionales.

"Nuestros mandamientos", agregó Aznar en lenguaje del Nuevo Testamento, "se resumen en dos: fortalecer, renovar, regenerar nuestra democracia y modernizar nuestro país". Y, aprovechando la cita a san Juan, exhortó a las juventudes del Partido Popular a recuperar pulso moral, a terminar con la moda de no creer en nada y a comprometerse, en cambio, con valores y, creencias.Aznar personalizó en sí mismo y afirmó que no ya su partido, sino él, tiene tres compromisos con los jóvenes: en relación con el empleo, la vivienda y la mili.

No prometió un determinado número de puestos de trabajo, con la teoría de que la creación de empleo es cosa de las empresas, pero enunció que "hay que conseguir más estabilidad en los contratos". La responsabilidad del Gobierno, matizó, es propiciar una reducción de tipos de interés que favorezcan la contratación de jóvenes. Anunció fórmulas de financiación para ayudarles a disponer de una vivienda, pero lo condicionó a la marcha general de las cosas". Y prometió, eso sí, la reducción de la mili a seis meses, sin perder de vista que las Fuerzas Armadas "dispongan de la capacidad de responder a los riesgos que tiene España".

El presidente del PP aseguró no entender la carestía del terreno en nuestro país y definió la liberalización del uso del suelo como una necesidad de primera envergadura.

Las propuestas del PP son, según él, las únicas de las que se está hablando porque no hay nadie que conozca una sola oferta del PSOE: "Sólo repiten 'esto es imposible', 'eso es imposible', 'aquello es imposible'.' Están en el inmovilismo, que siempre es estéril".

En estos momentos, según Aznar, el. cambio se ha convertido en una cuestión de "higiene democrática". Un cambio para el que pide un apoyo másivo de los jóvenes, específicamente de aquéllos que van a votar por primera vez. A los que están afiliados a Nuevas Generaciones -en total, dijo, el PP cuenta ya con 500.000- les dijo que "hay que limpiar de un plumazo la corrupción en España. Una corrupción que ha sido resultado del estilo de gobierno socialista y del que es responsable Felipe González".

Críticas de Alvarez Cascos.

De otro lado, en una reunión informativa con la Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP), el, secretario general del PP, Francisco Álvarez Cascos, lejos de reconocer que existe cierta contradicción entre sus actuales propuestas fiscales y las de 1993, arremetió ayer contra el PSOE, aunque no por su política fiscal, sino por la social. Cascos aseguró que los únicos que han incumplido han sido los socialistas, ya que, "desde Eduardo Dato, fueron los primeros en España en hacer una política de pensiones restrictiva", informa Anabel Díez. Esa declaración causó cierta sorpresa entre los periodistas, ya que Aznar fue el primero en pedir que las pensiones no se utilizaran como arma electoral, puesto que todos los partidos, a través del Pacto de Toledo, han acordado mantener una política idéntica a la seguida hasta ahora en esa materia.

El secretario general del PP aclaró posteriormente que la crítica a la política de pensiones del PSOE no es por su actuación de ahora, sino por lo que hizo en 1985, cuando llevó al sindicato UGT a casi una ruptura total con él. Aprovechó el número dos del PP para dirigirse a los pensionistas y tranquilizarles acerca de que, "sea cual sea el Gobierno", no hay razones económicas ni políticas que pongan el peligro el actual sistema de pensiones.

Según Álvarez Cascos, no habrá una privatización de la Sanidad en caso de ganar el PP las elecciones, sino una introducción de formas de gestión de la empresa privada" y una política de conciertos con clínicas y hospitales privados para que palíen las listas de espera de los públicos.

El secretario general del PP exclamó que "tiene bemoles". que los socialistas hablen de programa oculto del PP cuando ellos sí que han tenido programa oculto bajo el lema de cien años de honradez.