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Entrevista:Julio Anguita | Secretario general del PCE y coordinador general de IU

"Yo no voy a silenciar el recorte que se avecina en las pensiones"

, Julio Anguita se desprenderá de la Secretaría General del PCE cuando termine esté mandato. Pero se presentará a la reelección como coordinador general de Izquierda Unida cuando llegue el momento. Añora Córdoba, que es como su "claustro materno", pero se pertrecha para seguir en Madrid. No es la única contradicción.Pregunta. Después de haber exhortado a la opinión pública a que no crea en la conjura contra el Gobierno, ¿va a creerle esa misma opinión pública cuando dice que hay una confabulación contra el PCE?

Respuesta. ¿Cuándo he dicho que hay una confabulación contra el PCE? He dicho que, al terminar mi primera intervención en el congreso del PCE, algunos titulares ya estaban escritos. Más de cinco periodistas tuvieron bronca con sus jefes porque lo que éstos les decían no era lo que ellos habían oído en el congreso. Yo hice un discurso moderado sobre política sindical. ¡Pero faltaría más que nos autoimpusiéramos silencio cuando tenemos el deber y el derecho de analizarlo todo! Eso es i-rre-nun-cia-ble.

P. ¿Se siente el PCE en el derecho familiar de reconvenir a CC OO cuando cree que se descarría? ¿Se siente con un derecho de tutela?

R. Lo que yo digo es que el debate que ha tenido la izquierda política no lo han tenido los sindicatos. Ese debate empieza ahora en CC OO. No se trata de un enfrentamiento entre dos personas, sino entre concepciones sindicales distintas. El PCE tiene en común con los sindicatos que también forma parte del movimiento obrero; tanto como ellos, ni más ni menos. Por eso opinamos, sin entrar en el debate interno.

P. Una cosa sería opinar y otra es intervenir. Antonio Gutiérrez les ha dicho: ¡"Basta ya de injerencias!"

R. Quien me demuestre que; en mi intervención en el congreso del PCE hubo injerencias tiene mi dimisión como secretario general. A, mí nadie me ha visto, ni me va a ver, insultando a CC OO o a su secretario general en una rueda de prensa.

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P. Quizá alguien le pueda decir que usted tira la piedra y esconde lamano. Dice "no va a haber por mí guerra sindical", pero exhorta a la creación de comités comunistas de empresa.

R. Quien diga eso es un ignorante. Desde 1978 existen comités, agrupaciones, del partido en fábricas. Algunos descubren ahora la manteca. Lo que dije es que eso había que potenciarlo.

P. ¿Comparte o no la afirmación de Agustín Moreno de que; la dirección de CC OO "ha establecido un pacto de alianzas con el PSOE"?

R. Ahí no entró yo.

P. Es que ése fue el motivo de la bronca.

R. ¡Pues sobre eso no tengo nada que expresar!

P. ¿Teme que la aparición, á tres meses de las elecciones, de enfrentamientos entre los comunistas y sus propios aliados desanime a muchos ciudadanos de confiar en ustedes y, en consecuencia, en IU? .

R. Rechazo esa preguntó tal como está formulada.

R. ... Rechazarla no quiere decir que no le conteste. Es que usted parte de un principio que yo rechazo: enfrentamientos entre.:. ¡Que no! Hubo una acusación por parte del señor Gutiérrez y un silencio por mi parte. ¡No acusaciones mutuas, sino sólo de una parte!

P. A usted le gusta hablar de "una nueva forma de hacer política", Pero quizá tiene poco de "nueva forma de hacer política" el que se declare dispuesto a impulsar en Cataluña un partido leal al PCE si el PSUC decide diluirse en beneficio de Iniciativa per Catalunya, ¿no?

R. El PCE suprimió en su XIII Congreso el centralismo democrático, suprimió el concepto de disciplina. A ver si se enteran algunos ignorantes. El PCE abre a los medios de comunicación sus debates en la dirección, cosa que no hace nadie. Y sobre Cataluña: la obligación de todo partido político, como de toda orden religiosa, es extenderse por todo el Estado. Tenemos la obligación de que en Cataluña haya funcionando comunistas y queremos que sean los del PSUC. Si los del PSUC deciden irse porque ya no se sienten comunistas, que se vayan. Pero que no se sea como el perro del hortelano.

P. Si el PCE trata de hegemonizar IU, ¿no cree que mucha gente pensará que Izquierda Unida es sólo la fachada de un solar que ocupan y administran ustedes?

R. Con la palabra hegemonía ha habido ignorancia, pérdida de memoria y manipulación.

P. ¿Todo el mundo manipula? ¿Todo el mundo es ignorante?

R. No hablo de todo el mundo... Respecto a lo de los comités de empresa y el centralismo democrático, le he dado datos. En este caso: hegemonía viene de una palabra griega que significa dominio.

P. Que es lo que entiende todo el mundo.

R. No. ¡Es el que entiende quien quiere manipular! Desde Antonio Gramsci, hegemonía significa que las propuestas de una fuerza política se imponen porque son las mejores. Muchos de los compañeros que se han rasgado las vestiduras con la palabra hegemonía han votado treinta veces en IU que Izquierda Unida debe hegemonizar la izquierda y la sociedad.

P. Eso se refiere a Izquierda Unida. Pero la cuestión es el PCE.

R. Los miembros del PCE que estamos en Izquierda Unida o en Comisiones Obreras a título personal y no ligados por la disciplina de partido... Ponga usted esto.

P. Si están a título personal, ¿qué sentido tienen las votaciones que hacen en el PCE? .

R. El PCE, tal como fue definido en el XIII Congreso, es un lugar de discusión y de acción política. Preferimos convencer.

P. Tal y como lo dice, parece que es un club, no un partido.

R. Es un partido, pero de nuevo cuño. Lo dije ya en 1982. A lo que vamos: que yo diga que los comunistas tenemos obligación de que allá donde estemos nuestras ideas se abran paso ¿no es un derecho como el que reclaman para sí otras organizaciones? ¿Sabe cuál es el problema de fondo? Que somos el imprevisto, lo que no estaba en el plan.

P. ¿No es una visión demasiado trascendente sobre uno mismo: pensar que forma parte de un colectivo qué es el centro de la atención universal?

R. ¡Qué va! Mire el paisaje político. Maastricht: a un lado PP, PSOE, PNV, CíU. Reforma laboral: igual. Cuando empiecen a aparecer las consecuencias sociales del Tratado de Maastricht, habrá una bandera en la que la gente se recanozca. Eso es lo que no querían. Pero Izquierda Unida dio en el clavo cuando se opuso a Maastricht.

P. Felipe González vuelve a presentarse a la reelección. ¿Izquierda Unida tiene ya hecha, con eso, la campaña electoral?

R. Nuestro problema es que gire en torno á los programas, en torno a la memoria. A mí me preocupa la pérdida de memoria del electorado. Ahora don Alfonso Guerra plantea que hay que revisar el Tratado de Maastricht. ¡Pues bienvenido a casa, muchacho! Empiezan a ver lo que había, lo que hay, en ese tratado.

P. ¿Comparte el acuerdo de González y Aznar de dejar el asunto de las pensiones al margen de la pelea electoral?

R. No. Izquierda Unida fue uno de las firmantes del Pacto de Toledo, en muchos casos haciendo de tripas corazón, porque se garantizaba, se decía en el papel, el mantenimiento del sistema público. Pero, en el momento en que aparezcan interpretaciones que pretendan recortar el sistema público, nos desvincularemos. Llegar al 3% de déficit en 1999 requiere recortes brutales, brutales. Ya he oído á algunos diputados del PP que "habrá que plantear un plan de caballo". Felipe González sabe también que el camino es el recorte, porque no quiere aumentar la presión fiscal. Luego eso afecta a las pensiones. No lo dirán, pero saben que no tienen más remedio por el camino que han escogido. Por eso no ata mi boca un acuerdo que sé que significa una cortina de humo o un manto de silencio sobre algo que va a venir.

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