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La policía palestina iza su bandera en Nablús tras a retirada de los últimos soldados israelíes

La policía palestina izó ayer la bandera de la autoridad Nacional Palestina (ANP) en los cuarteles generales que la policía israelí ha ocupado durante los últimos 28 años y hasta el pasado lunes en la ciudad cisjordarnia de Nablús. Los agentes tomaron el control de Nablús tras la salida anticipada de los soldados israelíes, la noche del lunes, mientras miles de personas se echaban a las calles en medio de cantos y bailes para celebrar el fin de la ocupación.

Los130.000 habitantes de Nablús convierten a esta ciudad en la mayor de las seis que pasarán a estar controladas por la ANP. Con anterioridad, los israelíes han cedido Jenín y Tulkarem en cumplimiento de los acuerdos de paz de Washington. "Estoy muy contento por la liberación de Nablús y porque lo que acordamos [en septiembre en Washington] se esté llevando a la práctica con éxito", dijo a los periodistas el presidente de la ANP, Yasir Arafat, en su cuartel general de Gaza.Antes de fin de año, Israel debe retirarse también de las ciudades cisjordanas de Kalkiliya, Ramalá y Belén. El Gobierno de Simón Peres ha acelerado el proceso de repliegue de sus tropas en CisJordania para permitir la celebración de las primeras elecciones generales palestinas, previstas para el próximo 20 de enero.

"Éste es un momento histórico en nuestras vidas", exclamó en Nablús Majid al Masri, un palestino de 23 años, "no podemos creer que los israelíes estén ya realmente fuera de nuestras vidas".

Para evitar incidentes con la Población palestina, las tropas israelíes salieron de Nablús 48 horas antes de lo previsto, sin que hubiera llegado aún a la ciudad el contingente de 1.200 policías palestinos, procedente de Jericó, que se ocupará de mantener el orden. El secretario general de la ANP, Tayib Abdeliahim, se trasladó ayer a Nablús para supervisar la ocupación de los edificios evacuados.

Muchos de los habitantes de Nablús, soprendidos por la repentina retirada israelí en plena noche, salieron a las calles en pijama, a pesar del intenso frío, para festejar el fin de la ocupación con fuegos artificiales y disparos al aire. La Universidad de Al Najá y el resto de los centros educativos de la ciudad Cisjordania cerraron sus puertas para permitir que los alumnos participaran en la celebración, mientras los comercios exhibían en sus escaparates retratos de Arafat y banderas palestinas.

Los policías palestinos efectuaron ayer su primera patrulla conjunta con soldados israelíes en torno a la Tumba de José, un centro religioso venerado por los colonos judíos.

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