El Gobierno de México prevé un crecimiento del 3% y una inflación del 20,5% el año que viene
El Gobierno mexicano calcula que el producto interior bruto (PIB) caerá un 6% este año, pero tiene la esperanza de que para 1996 se recupere y llegue a aumentar el 3%. Así figura en las líneas generales de política económica que el secretario de Hacienda, Guillermo Ortiz, ha presentado ante, la Cámara de los Diputados junto al proyecto de Presupuestos del Estado para el año próximo. México prevé terminar este año con una inflación del 51,37% y el que viene del 20,5%. En cuanto a la cotización del peso, este año terminará con un cambio medio de 6,31 pesos por dólar (ahora está a 7,8), mientras que para el año que viene el tipo medio de cotización será de 7,7 pesos por dólar.Por otra parte, el Gobierno tiene previsto destinar en 1996 unos 9.000 millones de dólares (algo más de un billón de preguntas) a apuntalar el sistema bancario. Esa cantidad equivale a las tres cuartas partes de lo que recibió hace tres años por la privatización de las entidades financieras que estaban en manos del Estado.
La cantidad programada, exactamente 69.800 millones de nuevos pesos (9.065millones de dólares), contrasta con los 37.856 millones de nuevos pesos (12.618 millones de dólares al cambio promedio de entonces) que obtuvo el Estado por la venta de la banca pública entre 1991 y 1992. Ortiz precisó además que ese fondo se dirigirá a la ampliación de tres programas de apoyo a deudores y un esquema de capitalización bancaria, que representan el 4,2% del PIB de 1.995.
El capítulo sobre "saneamiento financiero" para 1996 prevé también 14.100 millones de nuevos pesos (unos 1.831 millones dólares) para la red, de autopistas en concesión, que operan de esta forma desde 1992.
El Gobierno considera que la recuperación económica provendrá de la demanda por lo que impulsará, la inversión y el consumo privados, las exportaciones y la inversión pública.
Según el presupuesto, la inversión total crecerá el 4%, de la que un 0,7% será inversión pública. Las exportaciones crecerán un 19,4% por lo que el sector exterior aportará al PIB un 1,9%.
