De la Rosa falsificó las cartas para justificar el 'vaciamiento' de KIO por razones de Estado

El financiero Manuel Prado y Colón de Carvajal ha sido citado hoy a las 12.30 a declarar ante José Aparicio Calvo, jefe de la secretaría técnica de la Fiscalía General del Estado, en relación con el envío a los altos representantes del Gobierno de Kuwait y de Kuwait Investment Office (KIO) de cartas falsificadas con el emblema y el membrete de la Corona por parte del gestor en España de las inversiones kuwaitíes en 1990, Javier de la Rosa. Las cartas falsificadas obedecían al propósito de encubrir la desaparición de 500 millones de dólares que KIO le reclama ahora por vía judicial.

Dos de estas cartas, de las tres sobre las que EL PAÍS informó el pasado viernes día 10, y que hoy se reproducen íntegras en esta página, ponen de relieve las maquinaciones de De la Rosa. Una de las misivas va dirigida al hombre fuerte de Kuwait durante la invasión de ese país por las tropas de Iraq, el jeque Alí Jalifa al Athbi al Sabaj, que era ministro de Finanzas. El falso firmante es Manuel Prado y Colón de Carvajal, el papel utiliza el membrete del palacio de la Zarzuela, con el nombre del falso firmante en el centro.El montaje se realizó en torno a Alí Jalifa y también por medio de una carta similar dirigida al presidente, de KIO, Fahad al Sabaj, miembro de la familia real kuwaití. Alí Jalifa había visitado Madrid el 20 de agosto de 1990, como parte de una gira por Europa. Durante su visita se entrevistó, con Felipe González y con los ministros de Economía y Hacienda, Carlos. Solchaga, y de Asuntos Exteriores, Francisco Fernández Ordóñez. El hombre fuerte de Kuwait declaró que "las inversiones directas del Gobierno de Kuwait y las realizadas a través de KIO [en España] irán en aumento".

La carta falsificada por De la Rosa, escrita en un inglés macarrónico, tiene fecha 10 de octubre de 1990, cuando Kuwait estaba invadido por Irak. En ella se afirma: "Según las instrucciones de Su Majestad, me dirijo a Su Excelencia de manera estrictamente personal y confidencial para participarle en este momento de gran preocupación en su país, para agradecerle su asistencia". Un párrafo significativo de la carta y de la calidad del montaje se refiere a la conexión entre el dinero enviado para la capitalización del Grupo Torras, la guerra Irak-Kuwait y la instrumentalización de partidos e instituciones españolas. "Agradecemos sus muchos y variados esfuerzos ( ... ) En particular nos agradece los de las últimas semanas, hechos a través del Grupo Torras y que han sido de inestimable ayuda para la clarificación de asuntos políticos delicados relacionados con EE UU y el uso de sus bases de modo que los planes acordados pudieran llevarse a cabo".

Por tanto, sugiere que la aportación de dinero tuvo directa relación con la actitud española respecto a EE UU y la utilización de las bases españolas para bombardear a Irak. "Confío en que Su Excelencia entenderá que no pueda ser más explícito en mi agradecimiento, pero su última y muy amplia contribución, primero en entregas parciales y más tarde por la cantidad total, ha hecho posible superar los obstáculos que nos preocupaban. En este camino, no sólo los partidos políticos, sino también el Gobierno de España continuará en la línea política de nuestras tradicionales relaciones", añade la carta.

Otra carta que EL PAÍS reproduce, de idéntica fecha a la anterior, 10 de octubre de 1990, está dirigida presuntamente por Prado a Javier de la Rosa.

"Querido Javier, te adjunto carta dirigida a Su Excelencia Sheik Ali Khalifa Al Athbi Al Sabah, ministro de Finanzas de Kuwait, para su entrega, dado que, por razones de Estado, sólo puedo enviarla a través tuyo".

Pero he aquí en este párrafo la calidad del montaje: "La carta, como verás, se refiere a los 129 millones de dólares del año 1989 y a los 300 millones de dólares de hace pocas semanas". Ésta fue la cobertura utilizada por De la Rosa para justificar la desaparición de 480 millones de dólares, que, con intereses, completan la cifra de 500 millones de dólares (65.000 millones de pesetas de la época) por los cuales se le ha demandado en el Reino Unido y en España. Hoy, Manuel Prado, que conoció la existencia de las cartas falsifica das, dará su versión ante la Fiscalía.