Nunca se detectó venta ambulante en Valladolid , dice un acusado de la colza
"No se inspecciona lo que se ignora que existe", alegó ayer Miguel Casado edil de Sanidad de Valladolid por el PSOE en 1981 y el último de los ex cargos públicos procesados por el caso de la colza en declarar en el juicio. Según él, en Valladolid no había venta ambulante en aquella época o al menos, la policía municipal, a la que correspondía descubrir lo ilegal y que no dependía de su concejalía, no la detectó.El procesado, médico de profesión, especificó que hasta que se clausuró no supo que un almacén clandestino del barrio de Los Pajarillos comercializaba aceite tóxico. También dijo que no fue informado -"no tenía por qué serlo"- por la Jefatura de Comercio Interior de Palencia de que en marzo de ese año, casi dos meses antes de qué se produjera la primera muerte, ya se había, interceptado en esa provincia a un vendedor que se abastecía en él.
