El Gobierno prepara un golpe demoledor contra los grupos 'ultras' judíos
Estremecido por el asesinato del primer ministro, Isaac Rabin, y aprovechando el repudio universal contra el atentado del sábado, el Gobierno israelí planea un golpe demoledor a las organizaciones ultraderechistas judías. Fuentes solventes dijeron anoche que los organismos de seguridad están compilando "la información más minuciosa posible acerca de las actividades de las células terroristas incrustadas en el corazón de la sociedad israelí".Según especialistas en grupos terroristas judíos, existen entre 200 y 300 judíos armados dispuestos a recurrir a las armas -incluso contra judíos- para sabotear el proceso de paz con los palestinos. Esos fanáticos pertenecen a agrupaciones dispersas e ilegales que incluyen al movimiento Kach y el grupo Kaliane Vive, ambos de orientación ultranacionalista y ultrarreligiosa que en el pasado inspiró a los tres protagonistas de los más traumáticos sucesos internos de los últimos años: el asesinato con una granada de fragmentación de cinco palestinos en Jerusalén en 1982, la matanza de palestinos que oraban en la mezquita de Hebrón en febrero de 1994 y el asesinato de Rabin al término de una manifestación pacifista en Tel Aviv la noche del sábado.
Estudiosos del a menudo ignorado fenómeno del terrorismo judío apuntan un denominador común: los autores de los tres atentados eran estudiantes de las yeshivas, escuelas religiosas judías, a menudo transformadas en semilleros de militantes dispuestos a matar y morir matando. Los investigadores tratan de verificar informaciones según las cuales Yigal Amir, el estudiante de Derecho, de 25 años, acusado de asesinar a Rabin, no actuó solo, como dijo al ser detenido, sino que fue el brazo ejecutor de los designios de un grupo extremista llamado Eyal, las siglas en hebreo de la autodenominada organización de Combatientes Judíos. Avishai Ravid, jefe de la Eyal ha negado toda vinculación con Amir y ha condenado el asesinato, pero en medios de la Universidad de Bar Ilán, donde ambos están inscritos, se dice que eran amigos inseparables".
Amir en ningún momento expresó remordimiento por el atentado contra Rabin. Cuando se le informó que el primer ministro había fallecido dijo que se encontraba "satisfecho" y que había obrado "por órdenes de Dios".
Los detalles del asesinato siguen confusos. Una versión dice que Amir usó un revólver calibre 22. Otra, que los tres disparos que alcanzaron a Rabin en la espalda y el tórax fueron hechos con una pistola automática calibre nueve milímetros. Amir es soltero y reservista de la unidad de élite Golani. Vivía con su familia en su localidad natal de Herzliya, al norte de Tel Aviv, y tenía licencia para portar armas porque trabajaba como guardia jurado. No tiene antecedentes criminales, pero en julio pasado cuando, asistía a una conferencia de Rabin en Tel Aviv, le interrumpió a gritos y fue expulsado por la policía. Al parecer, Amir ha declarado que se proponía asesinar también a Simón Peres, pero que éste se libró al abandonar prematuramente el evento. Un hermano de Yigal Amir ha sido detenido, informó ayer la televisión israelí sin precisar el nombre ni los motivos.
Menajem Friedman, un académico especializado en los movimientos extremistas, declaró que muchos de los judíos ultranacionalistas "tienen la visión simplista de que la eliminación de un líder puede provocar automáticamente el colapso de un procesó político". Eyal y otro grupo extremista que se autoproclama Espada de David han realizado en meses pasados una serie de amenazas contra "los traidores en el Gobierno". En uno de sus comunicados, la Espada de David dijo que Rabin merecía morir "porque se ha manchado las manos de sangre judía".
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