Cinco generales juzgarán a Perote antes de Navidad por robo de secretos

El coronel Juan Alberto Perote, ex jefe de la Agrupación Operativa del Cesid, se sentará en el banquillo antes de Navidad. Según fuentes jurídicas, el sumario abierto al ex agente secreto por sustracción de documentos clasificados está casi concluido y el juicio militar se celebrará, probablemente, antes de que acabe el año. Cinco generales, presididos por el auditor presidente del Tribunal Militar Central, José Luis Rodríguez-Villasante, juzgarán a Perote por un delito que el Código Penal castrense castiga con penas de hasta 10 años de prisión.

El sumario instruido desde el pasado 18 de junio por el titular del Juzgado Togado Militar Central número 1, el coronel Jesús Palomino Yébenes, a raíz de una denuncia presentada por el entonces director general del Cesid, Emilio Alonso Manglano, está ya en su última fase. La Justicia militar avanza a un ritmo mucho más acelerado que la ordinaria. No padece los atascos que aquejan a esta última y, además, el bien jurídico que protege, la disciplina castrense, la impregna de un sentido de la ejemplaridad que se basa en la inmediatez.El Tribunal Militar Central deberá resolver en los próximos días el recurso presentado por el abogado de Perote, Jesús Santaella, contra el auto que le devolvió a prisión el pasado 29 de septiembre. Una vez que se resuelva el recurso y se practiquen las últimas diligencias, el juez Palomino elevará al Tribunal Militar Central la propuesta de conclusión del sumario.

Tras el cierre del sumario se iniciará la fase del juicio oral, en la que tanto la defensa corno el fiscal disponen de un plazo de 10 días para calificar los hechos y proponer las pruebas a practicar de cara a la vista pública.

El coronel Perote fue inicialmente procesado por un delito de sustracción y revelación de secretos relativos a la seguridad o defensa nacional. El 12 de julio, el Tribunal Militar Central revocó el procesamiento por revelación de secretos. Estimó que los documentos difundidos hasta entonces por El Mundo, sobre la escucha ilegal de conversaciones privadas, aunque hubieran sido proporcionados por Perote no afectaban a la seguridad o defensa nacional.

De tres a diez años

No obstante, confirmó el encausamiento en lo relativo a la sustracción de documentos. El coronel salió de la cárcel el 15 de julio, en régimen de arresto domiciliario, pero el juez ordenó su reingreso 76 días después, tiras la publicación de nuevos documentos secretos por el citado diario.El artículo 53 del Código Penal Militar castiga con entre tres y diez años de prisión al militar que "se procurare" información clasificada y señala que la pena se aplicará en su mitad superior cuando el sujeto "sea depositario o conocedor del secreto o información por razón de su cargo o destino" como sucede en el caso de Perote.

El tribunal que juzgará a Perote estará presidido por el presidente del Tribunal Militar Central, el general de división José Luis Rodríguez-Villasante, procedente del cuerpo jurídico de la Armada. Rodríguez-Villasante accedió al cargo el pasado 28 de julio, por decisión del ministro de Defensa, Gustavo Suárez Pertierra, tras pasar a la reserva por edad su antecesor en el cargo, el general Eugenio Sánchez Guzmán.

Fuentes jurídicas aseguran que el hecho de que el ascenso y destino de los jueces militares dependa del ministro no menoscaba su independencia, como ha ratificado recientemente el Tribunal Constitucional.

De los otros cuatro miembros del tribunal que deberá juzgar a Perote dos serán elegidos entre los cuatro vocales del Tribunal Militar Central. Se trata de los generales de brigada Diego Antonio Ramos Gancedo, Luis Fernández de Henestrosa Balmaseda, José Luis Lázaro Mangas y Pascual Garcís Ballester. El último ocupa la vocalía que dejó vacante Rodríguez-Villasante cuando fue nombrado auditor presidente.

Los otros dos miembros del tribunal se elegirán "por insaculación" (sorteo) entre los generales de brigada y contraalmirantes, no jurídicos, destinados en el órgano central del Ministerio de Defensa y en los cuarteles generales de los ejércitos, incluidos en una lista que se confecciona al inicio de cada año judicial.

Contra la sentencia que dicte en su día el tribunal cabrá elevar recurso ante la Sala de lo Militar del Tribunal Supremo. Esta sala la integran cuatro magistrados de la carrera judicial y cuatro del cuerpo jurídico militar y está presidida por el juez civil José Jiménez Villarejo.