Simpson concede hoy su primera entrevista, tras el juicio que lo absolvió, a la emisora de televisión NBC

La primera entrevista que concede el ex jugador de fútbol americano O.J. Simpson, gratis y sin límites, después de haber sido declarado no culpable en un juicio por el doble homicidio de su ex mujer y un novio de ésta se emite esta noche en la cadena de televisión norteamericana NBC. Ya que Simpson no testificó en el juicio que concluyó la semana pasada y que ha sumergido a EE UU en un intenso debate sobre la división racial, la expectación sobre cómo pueda responder al interrogatorio de dos periodistas (Tom Brokaw y Katie Couric) es tremenda.Representantes de Simpson y de la NBC anunciaron que habían acordado no limitar ni censurar en modo alguno el tipo de preguntas que se harán esta noche. La entrevista, que tendrá una hora de duración, se produce en plena resaca informativa del que ha sido llamado el proceso del siglo, cuando el día a día de los testimonios se ha sustituido con interpretaciones y epílogos variados.

Uno de los rumores más extendidos era que Simpson se había refugiado en un país caribeño tras ser encontrado no culpable del doble asesinato, el año pasado en Los Angeles.

Aparte de repetir que él no lo hizo, lo cual va en contra de toda la evidencia presentada en el juicio, se desconoce cuál puede ser el mensaje de Simpson esta noche. El motivo de la comparecencia desde luego no es económico pues tendrá lugar en una cadena gratuita de ámbito nacional y, como ha confirmado un comunicado de la NBC, durante su emisión no habrá pausas publicitarias y "no habrá pagos ni otrotipo de compensaciones para Simpson ni para sus representantes".

Simpson intentó sin éxito vender su entrevista a varios canales de televisión de los llamados pay-per-view, es decir, que requieren un pago con tarjeta de crédito para poder ser vistos, para sufragar de este modo la millonaria factura que debe a sus abogados. Según el diario New York Times, estas cadenas rechazaron el trato pues dudan seriamente que Simpson sea inocente en los crímenes por los que se le juzgó.