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Las cadenas impiden la entrada de coches en el parque de la Virgen Blanca

Antonio Jiménez Barca

Las decenas de coches que desde principios de agosto se colaban en el parque de la Virgen Blanca, en la Ciudad Universitaria, ya no podrán hacerlo. La Universidad Complutense cerró el pasado jueves el parque colocando unas cadenas en la entrada que impiden que los coches entren en la zona verde para luego, internándose en la arboleda, aparcar. La calle utilizada por los automovilistas para entrar era la de Bartolomé de Cossío y el espacio verde utilizado para aparcar era el comprendido entre la Facultad de Medicina y el Clínico.

Esta retirada de los automóviles es un nuevo capítulo en el toma y daca que, desde hace dos años, los vecinos de Moncloa mantienen con los dueños de los coches -la mayoría trabajadores o visitantes del hospital Clínico-. Los automovilistas comenzaron a utilizar el parque, uno de los más emblemáticos, como aparcamiento en 1992.

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Sobre la firma

Antonio Jiménez Barca
Es reportero de EL PAÍS y escritor. Fue corresponsal en París, Lisboa y São Paulo. También subdirector de Fin de semana. Ha escrito dos novelas, 'Deudas pendientes' (Premio Novela Negra de Gijón), y 'La botella del náufrago', y un libro de no ficción ('Así fue la dictadura'), firmado junto a su compañero y amigo Pablo Ordaz.

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