El Rey destaca el papel dinamizador de las empresas familiares en épocas de crisis

El rey don Juan Carlos lanzó ayer en El Escorial (Madrid) un mensaje de apoyo a las empresas familiares, cuya facturación en España representa el 65% del producto interior bruto (PIB). Con motivo de la inauguración del VI Congreso Mundial de Empresas Familiares, una asociación que agrupa a cerca de 500 de las más importantes compañías familiares del mundo -entre ellas 97 españolas-, el Monarca destacó la mayor facilidad de adaptación de este tipo de empresas a los distintos cambios económicos. "Su estructura y forma de gestión abren camino a nuevas fórmulas de crecimiento", señaló el Rey. "Es éste un activo oportuno en épocas de crisis".Al acto asistió también el presidente de la Comunidad de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, quien coincidió con don Juan Carlos en destacar la función de motor de las empresas familiares en la economía. "Es un elemento clave para la estabilidad del sistema económico, por su flexibilidad para adaptarse a los cambios y su importante potencial en la creación de puestos de trabajo, pilares básicos, especialmente el empleo, de nuestra política económica". Ruiz-Gallardón aseguró que la Administración que él preside tiene previsto un programa especial de ayudas a las Pymes, la creación de nuevas áreas empresariales y la reducción de la presión fiscal con el fin de estimular el crecimiento de este sector.

Las empresas familiares tienen un importante peso en el tejido productivo de cualquier economía avanzada. Según datos del Instituto de Empresa Familiar, en Estados Unidos, el 35% de las 500 mayores empresas industriales son de carácter familiar. En el Reino Unido, lo son el 76% de las 8.000 mayores compañías. Y en España, el 20% de las 1.000 empresas más importantes. Entre las compañías españolas participantes destacan Antonio Puig, SA, Editorial Planeta, Entrecanales y Távora, Ferrovial, Nutrexpa, Lladró, Cementos Molins y González Byass, entre otras. Por parte extranjera, destacan Damart, Hermés, Barón de Rothschild y De Agostine.

La sucesión, la incorporación de la gestión profesional externa al núcleo familiar, el mantenimiento del control frente a la necesidad de recursos financieros o de alianzas con otras empresas y el entorno fiscal son los principales desafíos que están siendo debatidos por los 250 asistentes (actuales gestores y sus relevos generacionales, consultores, profesores, etcétera) al seminario.