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El cadáver del atracador del militar tiene ocho orificios de bala

LUIS FERNANDO DURÁN, El cuerpo sin vida de Miguel Ángel Castilla, de 24 años, el atracador que murió tiroteado por un sargento al que robó 30.000 pesetas, presenta ocho orificios de bala, según el parte médico. El informe facultativo indica que el fallecido tiene agujereado el abdomen, la ingle, el cuello y la pierna derecha por las balas vomitadas de una pistola Star de 9 milímetros Parabellum.

En concreto, el análisis del médico de guardia indica que la víctima presenta cuatro impactos en el muslo derecho. Los otros están en la región cervical anterior, en la zona dorsal paraespinal (en la espalda), en la región inguinal, y en el hipocondrio, derecho (la boca del estomágo). El informe no aclara si los orificios son de entrada o de salida.Según la Policía, todas las detonaciones fueron efectuadas por Félix Anguiano García, de 23 años, un sargento del ejército al que supuestamente robó la víctima. El suboficial llevaba su arma reglamentaria del ejército, una Star con nueve balas, una de ellas de fogueo:

El suceso se desató cuando el sargento sacó 30.000 pesetas de un cajero automático de la calle de Escalona (Aluche). En ese momento fue asaltado, a punta de cuchillo, por Miguel Ángel Castilla. Eran las seis y media del pasado lunes. Después de arrebatarle el dinero, el ladrón huyó. El suboficial, armado con una pistola, le siguió.

En la persecución efectuó un disparo de fogueo. Frente al número 91 de la calle de Escalona le dio alcance y se produjo un forcejeo. Según la policía, hubo cinco o seis disparos. En un principio, los agentes indicaron que el asaltante recibió el impacto de tres balas: una en el abdomen, otra en el cuello y una tercera le acertó en la pierna izquierda.

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"Estoy muy preocupado por lo que me pueda pasar", explicó el sargento a su familia

VIENE DE LA PÁGINA 1Tras los disparos, Miguel Ángel Castilla, el delincuente, quedó agonizando en el suelo. Fue evacuado al hospital Clínico por una ambulancia privada. Falleció al ingresar en dicho centro, donde se le descubrió que tenía ocho orificios de bala.

El presunto homicida, Félix Anguiano, pasó el día de ayer arrestado en la Brigada de Policía. Anoche fue traslado a los juzgados de la plaza de Castilla donde quedó a disposición del juez de guardia. Anguiano, que lleva dos años destinado como suboficial al Regimiento de Caballería Villaviciosa 14 -con sede en la carretera de Brunete, en el término municipal de Villaviciosa de Odón-, es natural de Ibros (4.070 habitantes), Jaén. A los 14 años inició la carrera militar. La vida le sonreía, según sus parientes. Todos los fines de semana que podía se trasladaba a su pueblo, explicaron sus familiares jienenses. Los padres se trasladaron ayer a Madrid para acompañar al mayor de sus tres hijos. "Sólo hemos podido hablar con él a través del teléfono. Estamos a la espera de verle", indicó su hermana, desde Jaén. "Nos ha dicho que está muy preocupado por lo que le pueda pasar", agregó. "No ha hecho ningún comentario sobre lo que ha pasado, únicamente ha dicho que se defendió".

Un comandante del regimiento acompañaba ayer al militar en los calabozos del recinto policial de la calle de Pontejos, en el distrito Centro. Este mando militar será el encargado de llevar la defensa del sargento.

Según sus compañeros de cuartel, Félix Anguiano es un hombre "de carácter amable y muy buen companero". "He pasado muchos días con él y nunca podría pensar que esto le pasara a él", agregó un soldado amigo. "No era una persona con carácter violento", comentó. Su hermana ratificó ayer estas palabras: "Todo lo que pueda decir de mi hermano es poco. Es una persona magnífica".Mientras tanto, el cadáver de la víctima permanecía ingresado en el Instituto Anatómico Forense. Los familiares del fallecido se negaron a realizar declaraciones. Miguel Ángel Castilla acababa de salir de la cárcel, según explicaron sus vecinos.

La Jefatura Superior de Policía indicó que había estado detenido en cinco ocasiones en Madrid por robo con fuerza. La última, en enero del año pasado. Tenía otro antecedente por robo cometido en Guadalajara y una reclamación judicial por lesiones en Lugo.

Más policía

La muerte del presunto atracador, Miguel Angel Castilla, ha suscitado las quejas de los vecinos del barrio y de la coalición IU. Según varias asociaciones del distrito desde hace varios meses la delincuencia se ha "duplicado por la escasa vigilancia policial". Para el concejal de IU, Julián Rebollo, lo ocurrido el pasado martes en Aluche es la consecuencia del aumento del tráfico de drogas, por lo que reclamó mayor presencia policial en el distrito. El edil ha solicitado que se convoque una Comisión de Seguridad.

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