HB dice que la ocupación de la SER por Jarrai es una forma de lucha asumible

La ocupación de la emisora de la Cadena SER en San Sebastián por militantes de Jarrai, las juventudes de la Koordinadora Abertzale Socialista (KAS), fue ayer duramente criticada por todos los partidos firmantes del Pacto de Ajuria Enea y desde el ámbito de la profesión periodística. La única nota discordante la puso el dirigente de KAS y miembro de la Mesa Nacional de Herri Batasuna (HB) José María Olarra, quien calificó la irrupción en la emisora de radio como "una forma de presión y de lucha perfectamente asumible".

Precisamente, el dirigente de KAS y parlamentario vasco tenía que declarar ayer ante el juez por unas manifestaciones contra los periodistas realizadas tras la muerte, en septiembre 1993, de Gurutze Yanci tras su paso por el cuartel de la Guardia Civil de Tres Cantos (Madrid). Olarra es uno de los dirigentes independentistas que ha empleado su verbo con más violencia contra los medios de comunicación.Ayer, a las puertas del juzgado de Bilbao, dijo: "Creemos que entrar en una emisora tal y como entraron ayer [por el martes] los de Jarrai es perfectamente asumible, porque entendemos que es una forma más de trabajo y una forma más de lucha y de presión, y no contra los periodistas, sino contra el medio de comunicación". El parlamentario abertzale aseguró que estas acciones son positivas y agregó que cualquier periodista o medio tiene derecho a ejercer la crítica, pero censuró a los que criminalizan a la juventud vasca.

Durante las manifestaciones organizadas el sábado por HB en favor de la juventud vasca se lanzaron octavillas anónimas en las que se podía leer: "Caña a los perros periodistas". El asalto de la SER para leer un comunicado en euskera y las manifestaciones frente a las sedes de los periódicos El Correo y Deia en Bilbao del martes forman parte de una campaña organizada por la izquierda abertzale para protestar contra la "manipulación inforrriativa" de los medios.

Todos los partidos del Pacto de Ajuria Enea, representantes del Gobierno vasco, la Federación de Asociaciones de la Prensa de España y la Asociación Española de Radiodifusión han censurado la acción de Jarrai. El viceconsejero de Interior, José Manuel Martiarena, acusó a HB de dar "el empuje y el arrope político a todo esto que normalmente en todos los demás sitios lo que merecería es una repulsa con el mismo tratamiento de vandalismo que el comportamiento de los cabezas rapadas".

Eusko Alkartasuna responsabilizó ayer a HB de alentar la guerrilla urbana en Euskadi e Izquierda Unida hizo un llamamiento a la dirección de la coalición independentista para que "controle las actuaciones de sus jóvenes".

Los últimos incidentes de Zarautz y el asalto de la emisora de radio en San Sebastián han sembrado la preocupación entre los responsables de la Diputación de Guipúzcoa. El portavoz del Consejo de Gobierno de la Diputación, Luis María Bandrés, anunció que se ha pedido una entrevista con el consejero de Interior, Juan María Atutxa, como "medida para hacer frente a esta situación de violencia a través de medios democráticos".

El diputado del PP en el Congreso, Javier Peón, en declaraciones a la SER, instó a la justicia a investigar los hechos, "puesto que obedecen a una estrategia premeditada para aumentar el clima de tensión en las calles del País Vasco". También las juventudes del PNV y del PSE-EE denunciaron el asalto de la SER. Mientras los primeros calificaron a los militantes de Jarrai de "vándalos" que ya "no luchan por una patria ni por nada, sino que sólo son delincuentes comunes", las juventudes socialistas les acusaron de "querer crear en Euskadi una Alemania nazi donde los judíos somos los pacifistas y la Gestapo y las SS son HB y su cachorros de Jarrai".

Desde el ámbito profesional, la Asociación de Periodistas de Vizcaya ha hecho un llamamiento al entorno del Movimiento de Liberación Nacional Vasco (MLNV) para que cesen las amenazas y acciones violentas contra la libertad de expresión y la pluralidad de ideas de los profesionales del periodismo. "Pedimos que no renuncien a sus ideas y proyectos políticos y les exigimos que respeten la pluralidad y libertad de todos", indicaban en una nota. La UGT denunció los hechos, al igual que la Unión de Trabajadores de la Comunicación (UTC).