Duran se suma a Pujol en la negativa a apoyar una moción de censura del PP

Josep Antoni Duran Lleida, principal dirigente de la democristiana Unió Democrática de Catalunya, se alineó ayer con su aliado Jordi Pujol en la negativa de éste a apoyar una hipotética moción de censura del PP para derribar a Felipe González. "Entre el PP y CiU no hay moción de censura que valga", declaró ayer a Radio Nacional. Duran respondía a José María Aznar, quien desde Argentina invitó a los nacionalistas a apoyar una moción de censura si tantas ganas tenían de adelantar las elecciones legislativas. "Si no, los españoles pensarán que [Pujol] está jugando de farol o por intereses partidarios", dijo el presidente del PP.

En declaraciones a Radio Nacional, Duran justificó la negativa de CiU a apoyar una moción de censura en que, de acuerdo con la Constitución, ésta debe ser constructiva, es decir, con un candidato y un programa alternativo. "En este país, una moción de censura a Felipe González es equivalente a una moción de confianza al señor Aznar, y nosotros Io que hemos manifestado es que hemos perdido la confianza en el señor González. No hemos dicho que tengamos confianza hacia un hipotético Gobierno del señor Aznar", dijo Duran. "No- conocemos el programa alternativo", agregó el dirigente nacionalista, "ya que si es lo que el PP ha venido haciendo en su etapa de oposición, es un programa que no merecerá nuestra confianza".Jordi Pujol, por su parte, rehusó ayer contestar a Aznar cuando fue preguntado por las palabras de éste. El presidente catalán ya había rechazado taxativamente el sábado, tras entrevistarse con González, la posibilidad de que CIU apoyara una moción de censura. Pujol sí insistió en que la situación política obligaba a "caminar hacia unas nuevas elecciones [legislativas]", pese a que valora positivamente los dos años de colaboración con el Gobierno: "De esta colaboración ha sakudi beneficiada España y Cataluña", afirmó durante una visita oficial a las ciudades de Badalona y L'Hospitalet, informa Merche Artacho.El presidente del comité de gobierno de Unió opinó sobre la entrevista mantenida la víspera, entre Felipe González y Jordi Pujol: "Aunque la decisión del divorcio formal se decidirá esta semana, no creo que sea diferente a lo expresado ayer [por anteayer] por Pujol", dijo Duran. El comité de enlace de la coalición se reúne este miércoles. Duran se entrevistó ayer tarde con Pujol para recibir información de primera mano sobre lo hablado con González.

Preguntado por el posible adelanto electoral, Duran señaló que "puede ser un deseo pero no necesariamente una realidad", ya que la decisión no depende de los nacionalistas. Añadió que si bien hay un elemento para que las elecciones se adelante -que González carezca desde ahora de mayoría parlamentaria-, "hay otro elemento tan importante como éste y es que el Gobierno decida convocar, ya que constitucionalmente puede continuar en minoría en el Congreso".

Duran, que dentro de CiU ha sido un decisivo partidario de la ruptura con el PSOE, descartó que el Grupo Parlamentario Catalán vaya a practicar a partir de ahora una oposición semejante a la que ha venido practicando él PP o a la que llevó a cabo al PSOE cuando quien gobernaba era la UCD.

Inculpación de González

El líder democristiano coincide con Pujol en su deseo y convencimiento de que no habrá responsabilidad penal para González por el caso GAL: "No sería bueno para España, ni para el PSOE, ni para la democracia que el final del presidente González fuera una inculpación penal. No sería justo y ahí no va a haber responsabilidad penal".

Duran recordó que su partido, Unió Democrática, lleva meses defendiendo la necesidad de llegar a un pacto sobre calendario electoral. "Desde que se recuperó el caso GAL a finales de diciembre del año pasado", explicó el líder democristiano, "Unió entendió que el Gobierno iba a perder su capacidad de gobernar y por tanto iba a desaparecer la gobernabilidad".

Diputados de CiU consultados ayer tarde opinan que la coalición acabará por presentar una enmienda de devolución de los presupuestos, tanto si Pujol, adelanta las elecciones catalanas a este otoño como si las deja para abril. En el primer caso, porque los nacionalistas necesitan desmarcarse del PSOE si hay campaña electoral en Cataluña; en el segundo, para forzar a González a convocar lo antes posible. El desmarque se notará en los próximos días, según estas fuentes.