Arafat llega a un acuerdo con Israel para evitar el cierre de centros palestinos
La Autoridad Nacional Palestina (ANP), de Yasir Arafat, ha preferido el compromiso a lanzarse en una batalla por sus instituciones en Jerusalén. El pasado domingo, el ministro de Policía israelí, Moshé Shahal, amenazó con cerrar hoy tres oficinas palestinas en la parte árabe de Jerusalén al acusarlas de trabajar con la ANP, en contra de lo estipulado en los Acuerdos de Oslo de 1993. Finalmente, antes de que el incidente pudiera perjudicar las actuales conversaciones de paz, el negociador palestino Abú Alá aseguró que limitarán sus acciones a Gaza y Jericó.
Las tres oficinas en cuestión -el despacho de la radiotelevisión palestina, el consejo de sanidad y la oficina de estadísticas- sólo podrán quedarse en Jerusalén si sus responsables firman un documento en el que se comprometen a cortar todos sus lazos con la ANP.
En Gaza, tres periodistas palestinos del diario An Nahar fueron detenidos ayer por la policía autónoma acusados de colaborar con Hamás. A lo largo de toda la semana, las autoridades palestinas han detenido a más de 40 simpatizantes del grupo integrista.
En Beirut, tres hombres enmascarados asesinaron ayer al jefe de un movimiento islámico suní prosirio, Nizar al Halabi, en el primer atentado político en Líbano en lo qué va de año.
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