García-Castellón desbarata las peticiones de Conde que había aceptado Moreiras

El juez de la Audiencia Nacional que instruye el caso Banesto, Manuel García-Castellón, echó ayer por tierra las peticiones de los abogados de Mario Conde que había aceptado su sustituto, Miguel Moreiras,durante sus vacaciones. García-Castellón dictó un auto, que notificará hoy, en el que rectifica casi todas las decisiones de Moreiras y que, a la larga, propiciaban la táctica de Conde de dilatar el proceso más allá del 28 de octubre, fecha en la que se acaba laprórroga concedida a García-Castellón, por lo que, pasaría a Moreiras. Las condiciones impuestas por García-Castellón parecen asegurar el cierre del sumario en ese plazo sin necesidad de esperar a que se amplíen a seis los juzgados de la Audiencia.

La particular batalla que libran los jueces de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón y Miguel Moreiras por el caso Banesto vivió ayer un nuevo episodio. Moreiras, que asumió el caso durante las vacaciones de García-Castellón, accedió a varias diligencias presentadas por Arturo Romaní, ex vicepresidente de Banesto, que García-Castellón había rechazado. El auto del titular del caso Banesto, en respuesta al recurso de la Fiscalía de la Audiencia contra el auto de Moreiras, admite que vuelvan a declarar 22 testigos, aunque pone un plazo inicial de seis días (entre el 12 y el 18 de septiembre, siendo el 14 cuando acudirá el presidente de Banesto, Alfredo Sáenz). El juez considera lógico que los testigos que ya declararon puedan hacerlo de nuevo ante los abogados de las partes. Rechaza, sin embargo, que declaren 24 nuevos testigos -entre ellos el gobernador del Banco de España, Luis Ángel Rojo, y el presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV)- por considerarlo "inútil, extemporáneo e inhecesario".

García-Castellón ha rechazado también que tres economistas hagan un dictamen sobre los informes de los peritos nombrados por él. No obstante, sí acepta que esos tres peritos dictaminen sobre la documentación del sumario y que fue facilitada principalmente por el Banco de España y por Banesto. En este punto, el juez impone un plazo de 45 días a partir de hoy para que presenten el informe.

También rechaza, "por innecesario", solicitar a la CNMV el expediente de venta de acciones de Banesto en los días previos a la intervención del banco y a Banesto la información sobre venta de empresas. Sobre el envío de una comisión rogatoria a Panamá para que investigue la venta de acciones del grupo cementero, remite a la Sala de lo Penal ante la que fue recurrida.

Tanto en la declaración de los testigos como en el informe de los peritos, García-Castellón fija un plazo para poder cerrar el sumario antes del 28 de octubre, día en el que se le acaba la prórroga de seis meses que se le concedió para seguir con el caso. Precisamente, la táctica de los abogados de Conde y Romaní ha sido buscar todas las estratagemas para dilatar el caso y que no lo pueda acabar García-Castellón, que figura en la Audiencia como juez suplente de Moreiras, que siempre lo ha querido.

La otra posibilidad de que García-Castellón cierre el caso es que se amplíen a seis los juzgados de la Audiencia Nacional. Esta ampliación se encuentra en estudio y cuenta con muchos apoyos en Justicia y de la propia Audiencia. Fuentes cercanas al magistrado han reconocido que espera que lluevan, nuevos recursos para atrasar su labor. García-Castellón, de no mediar algún retraso, espera tener listo el sumario para elevarlo a la Sala a mediados de octubre. Para mediados de septiembre espera fijar la fianza de responsabilidad civil.