A Solana desde Sarajevo

Sería realmente cómico si no fuera por desdicha trágico que el señor Javier Solana, uno de los artífices del famoso acuerdo del 4 + 1, firmado en Washington en mayo de 1993, tocante a la creación de zonas de seguridad bajo protección de las Naciones Unidas en Sarajevo, Gorazde, Srebrenica, Zepa, Bihac y Tuzla, haya aplazado su visita a la ase diada capital bosnia invocando razones de seguridad. ¿Tan poca confianza le inspira el documento avalado con su firma como para ponerlo en tela de juicio ante los propios protegidos por él mismo? O, ¿es el fantasma de los enclaves anegados en sangre de Srebrenica y Zepa el que ronda su sueño y le atormenta como a Lady Macbeth?Ojalá fuera así, Pero me temo que el señor Solana -como Butros-Gali, Yasushi Akashi o el inolvidable lord Owen- tiene la conciencia tranquila. Su insistencia en negociar lo innegociable con los criminales de guerra de Pale muestra que el genocidio de Bosnia es un simple "detalle" en el diseño de su "profunda" estrategia global.

¡Un poco de ánimo, señor Solana! Si yo he podido entrar en Sarajevo como un simple ciudadano de a pie, usted, que dispone de medios de protección infinitamente superiores a los míos, puede hacerlo sin necesidad de atravesar el túnel agachado como una rata.

Lo invito cordialmente a pasar unos días en un apartamento sin luz, ni gas, ni agua, y compartir así la vida de sus protegidos. Desde hace unos días no hay bombardeos y los francotiradores aprietan con menos facilidad el gatillo. ¡Una verdadera fiesta para los sarajevitas!-