Muchas incógnitas sin despejar
Si Felipe González ve cumplido su deseo de no ser de nuevo canIdidato a la presidencia del Gobierno hay algunas preguntas que nadié sabe responder.¿Va a ser diputado, va a seguir como secretario general del PSOE después del próximo Congreso del partido? Sobre esas cuestiones todavía no ha dicho nada.
Si quiere seguir en el escaño ¿irá de número dos por Madrid, después del candidato a la presidencia del Gobierno? ¿Qué función desempeñaría en el grupo parlamentario? ¿Actuará el sustituto en el cartel electoral con autonomía plena como líder de la oposición en el Parlamento teniendo al lado en silencio a Conzález?
Estas preguntas no obtienen respuesta cuando son formuladas a los más destacados dirigentes socialistas. "Hará lo que quiera hacer", es lo más que se consigue a modo de respuesta.
El deseo de que González siga siendo el máximo líder del partido es lo que lleva a la mayoría de los miembros de la ejecutiva federal a defender que el candidato electoral no tenga entre sus prefensiones hacerse con el control del PSOE y de su grupo parlamentario.
Ese perfil "tranquilizador" - que se considera imprescindible coincide con la personalidad de Javier Solana, según las fuentes consultadas.
A falta de respuestas, la actual mayoría dirigente considera que el tiempo resolverá los enigmas. 0 mejor dicho, permitirá que González vaya exponiendo sus intenciones.