Tudjman rechaza la negociación con los serbios y exige que Krajina vuelva a Croacia

La diplomacia está en sus horas bajas en la antigua Yugoslavia. Mandan las armas. El presidente de Croacia, Franjo Tudjman, rechazó tajantemente la propuesta de los serbios de Krajina, que ocupan un quinto del territorio de su país, de retirarse del enclave bosnio de Bihac y de que los cascos azules se interpongan en la frontera croato-bosnia. Tudjman tiene a tiro de cañón a la capital de Krajina, Knin, y ve cercano su gran objetivo: que su régimen controle por completo una Croacia con las fronteras que reconoce la comunidad internacional y que se rompieron con la guerra de 1991.Por el momento, los serbios se baten en retirada en Bihac y otras zonas de Bosnia. La limpieza étnica tiene también color serbio. Pero se espera la reacción de las fuerzas del general Ratko MIadic, que nunca dejaron en el pasado de responder a las ofensivas enemigas.MIadic, según algunas fuentes, estudia ya en Knin la forma de defender Krajina. Su Ejército, además, prepara la reconquista de las ciudades perdidas en el Oeste de Bosnia y elimina todo rastro bosnio en los enclaves de Srebrenica y Zepa. Médicos del Mundo afirma que casi todos los hombres de entre 15 y 55 años han sido asesinados. La Cruz Roja sólo ha hallado a unos 200 prisioneros. Los demás están huidos o muertos.